El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció este jueves que planea reanudar la ejecución de prisioneros en espera de la pena de muerte, poniendo fin a casi dos décadas en las que el gobierno federal, no había impuesto la pena capital a los prisioneros.
El Procurador General, William P. Barr ordenó a la Oficina de Prisiones que programara ejecuciones para cinco reclusos que se encuentran actualmente pabellón de los condenados a muerte.
Según las autoridades, los prisioneros fueron condenados por asesinar niños.
La última ejecución federal fue en 2003. Desde entonces, ha habido una moratoria informal sobre las ejecuciones de presos federales, ya que los funcionarios del Departamento de Justicia revisaron sus procedimientos de inyección letal. Esa práctica fue subrayada durante la administración de Obama por la oposición personal del entonces Fiscal General Eric Holder a la pena de muerte, incluso cuando aprobó las decisiones de los fiscales de solicitar la pena de muerte en juicios específicos.
Barr aseguró que era hora de que los asesinos convictos sentenciados a muerte por jurados recibieran ese castigo final.
Con información de The Washington Post