El presidente Trump declaró este miércoles que está dispuesto a pedir al Congreso volver del receso para reforzar la verificación de antecedentes de los compradores de armas, afirmando también que no ve “ningún apetito político” para prohibir los rifles de asalto en el país.
Comentaros que llegan luego de que el presidente saliera de la Casa Blanca para visitar Dayton, Ohio y El Paso, en un viaje que corre el riesgo de avivar las divisiones raciales existentes actualmente en el país.
Sobre el tema, Trump aclaró que no cree que su retórica sobre la raza y la inmigración sea la culpable del aumento de la violencia inspirada en el odio como la de El Paso.
“Creo que mi retórica une a la gente”, declaró Trump, añadiendo además sentirse “preocupado por el surgimiento de cualquier grupo de odio”. Para el primer mandatario no importa si se trata de la supremacía blanca o de cualquier otro tipo de supremacía, el mensaje a no violencia es el mismo.
Con información de The Washington Post