Este 31 de octubre, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desvió la atención sobre la figura de China y los problemas en materia económica que atraviesa su país, anunciando que el enemigo está en casa y es la Reserva Federal.
Hace un día, el banco central estadounidense reveló la aplicación de un nuevo recorte de tipos de interés de un cuarto de punto, la tercera medida de este tipo tras reuniones consecutivas, el cual oscila ahora entre 1,5% y 1,75%.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario se quejó sobre la situación y aseguró que “¡China no es nuestro problema, es la Reserva Federal!”.
A juicio del jefe de Estado, “la gente está muy decepcionada con Jerome Powell (presidente del banco central) y la Reserva Federal”, pues “ha tomado decisiones equivocadas desde el principio, demasiado rápido, demasiado lento”.
“Otros se están adelantando y riéndose todo el camino del banco (…) Deberíamos tener los tipos de interés más bajos que Alemania y Japón. Somos ahora, de lejos, el país más grande y fuerte, pero la Fed nos pone en una desventaja competitiva”, siguió Trump en la red social.
Para estimular el crecimiento económico, aconsejó a la Reserva Federal aplicar medidas que coloque los tipos de interés alrededor de un 0%.
Desde el lado contrario, Powell prometió que pasará algo de tiempo hasta que se vuelva a cambiar el polémico aspecto.
Se espera que el próximo encuentro de la Reserva Federal se celebre a final de año.