Una querella librada desde febrero por el cineasta Woody Allen contra los estudios de la compañía Amazon terminó resolviéndose con un acuerdo, el cual, pese a no revelarse los detalles, se confirmó.
La demanda estaba motivada, de acuerdo con el neoyorquino, por incumplimiento de contrato.
A inicios del presente calendario, Allen llegó a un tribunal federal del sur de Manhattan después de que el gigante que ahora da sus primeros pasos en el contenido por streaming se hiciera a un costado tras un acuerdo para la grabación de cuatro películas ya acordadas con el afamado director.
La empresa había puesto como motivación para tomar dicha decisión los supuestos abusos de la estrella contra su hija Dylan en 1992.
Según la propia Amazon a través de su división en Hollywood, los lazos entre las partes se rompieron en 2018, cuando se puso pausa al lanzamiento de “A Rainy Day in New York”, comedia de Allen protagonizada por Timothée Chalamet, Selena Gómez, Jude Law y Elle Fanning.
Según el cineasta, la empresa no tenía fundamentos para acabar con el vínculo, especialmente si se apuntaba a un hecho ocurrido hace más de 20 años.
Asimismo, agregó que el tema era ya conocido, por lo que para Amazon no se trataba de algo nuevo en el panorama. Al estar al tanto de la situación, debían respetar con el acuerdo antes establecido.