El sureste de Estados Unidos se mantiene en alerta tras la llegada de una poderosa tormenta invernal que generó más de veinte tornados los cuales provocaron una decena de árboles caídos, destrucción de casas con incontables daños materiales y que trajeron consigo la muerte de al menos dos personas en la ciudad de Alabama y una en la ciudad de Luisiana.
Los estados de Misisipi, Luisiana, Alabama y Texas han sido los más afectados por este fenómeno natural, el cual provocó la emisión de una alerta a aproximadamente 50 millones de personas por la llegada de un fuerte frío, que podría dejar también sustanciales nevadas en la región.
Según el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, hasta la tarde de este martes, la amenaza de posibles ciclones se ha mantenido en la región mientras que la tormenta se ha extendido al valle de Ohio, Nueva Inglaterra y un frente ártico que también afecta a las planicies de la nación.
Las autoridades deducen que los daños causados por los tornados -de los que aún no se conoce cifra exacta de la cantidad que atravesaron la región- registrados en el sureste de la nación norteamericana, específicamente en Luisiana, Alabama, Misisipi y Texas son de gravedad.
Calvin Turner, subjefe de policía de Vernon, expresó que las autoridades temen que se incrementen las víctimas e indicó que los equipos de socorro continúan trabajando cada día aumentando los esfuerzos para lograr llegar a lugares distantes donde árboles y postes o talud de tierra bloqueen las rutas.
Las tormentas ocasionaron cuantiosas advertencias y alarmas de meteorólogos sobre posibles tornados, situación que hizo que algunas ciudades pusieran a disposición de la población, albergues luego de que además, un frente frío colisionara con masas de aire cálido sobre los estados con costas en el Golfo de México.
Según la Policía del municipio de Rapides, la tormenta ha dejado intransitables, innumerables rutas en Alexandria, 320 kilómetros al noroeste de Nueva Orleans, donde también destruyó automóviles en un estacionamiento.
Como parte de un desarrollado sistema meteorológico que desde el pasado lunes se encuentra cubriendo el Sur y el Medio Oeste de Estados Unidos, a través de su cuenta en twitter, el Servicio Meteorológico Nacional, informó las advertencias sobre estos fenómenos naturales que se acercaban al país, los cuales superaban las 200 alertas.
Debido a esta tormenta, cerca de un centenar de vuelos en el país tuvieron que ser cancelados de emergencia, la mayoría de ellos en Boston, Massachusetts, donde más de 40 aviones no pudieron aterrizar o despegar.
