Todo migrante indocumentado que sea detenido por la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos desde este 2 de enero en Tucson, Arizona, será devuelto a México, de acuerdo con el programa Protocolo de Protección Migrante (MPP).
Así lo aseguró este jueves a través de un comunicado el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el cual añadió que toda entrada ilegal por la zona suroeste del país, será tomada como una falta en la que la respuesta de las autoridades será la mencionada deportación.
Aún si se tratara de migrantes que intentan mantener rápidamente un estatus legal a través del asilo, la evolución de la solicitud deberá ser esperada en territorio mexicano.
Asimismo, se incrementó a siete el número de puertos ubicados en la frontera entre Estados Unidos y México, parte del programa conocido como “Quédate en México” y que busca reducir drásticamente el número de migrantes que año a año cruzan hacia Norteamérica.
Chad Wolf, secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, señaló que el Protocolo de Protección Migrante “ha sido una herramienta extremadamente efectiva, ya que Estados Unidos, bajo el liderazgo del presidente Trump, continúa abordando la actual crisis humanitaria y de seguridad en la frontera”.
Además, agregó que “el Departamento está totalmente comprometido con el programa y trabajará continuamente con el Gobierno de México para expandirlo y fortalecerlo. Confío en el éxito continuo del programa para juzgar casos meritorios rápidamente y prevenir reclamos fraudulentos”.
Hasta la fecha, más de 55.000 migrantes han sido deportados a territorio mexicano bajo el mencionado programa.
