El nuevo Plan de Uso de Suelos (PLUS), del Beni, aprobado en la Asamblea Departamental de la región del pasado 27 de noviembre de 2019, ha sido una de las normas que ha causado mayor controversia en Bolivia y que además se encuentra entre la lista de leyes que el tribunal internacional exige anular.
Los pueblos indígenas del departamento amazónico de Beni en Bolivia enviaron una carta a la Presidenta interina, Jeanine Aňez, donde le solicitan ser escuchados sobre el nuevo Plan de Uso de la Tierra que fue aprobado el pasado mes de noviembre.
Desde su decreto, los líderes indígenas de la región han rechazado rotundamente la norma implementada por el gobierno y se quejan de que sus peticiones no han sido tomadas en consideración, así como el reclamo por no haber sido consultados e informados acerca de los detalles de dicha norma.
Es por ello que los nativos describieron en una carta dirigida a la Presidenta interina de Bolivia, Jeanine Aňez, que el contenido del nuevo Plan no fue comprensible por los pueblos indígenas y que claramente a su juicio, favorece únicamente al sector agroindustrial, especialmente el del monocultivo de soja.
En la carta, la comunidad indígena también participa que si se implementa este Plan, el impacto será en toda la región y amenazará los medios de subsistencia no sólo para los pueblos y naciones indígenas, sino para todos.
Dicha norma, aprobada por el gobernador Alex Ferrier en el pasado mes de octubre durante el gobierno del ex presidente Evo Morales, tuvo la intención de cambiar el uso de suelo para fines agropecuarios hasta en 10 millones de hectáreas.