Moderna Inc, farmacéutica de biotecnología pionera en tratamientos, anunció el lunes 24 de febrero el desarrollo de un primer lote de una vacuna experimental para tratar el coronavirus (COVID-19). Las muestras fueron enviadas desde el laboratorio en Massachusetts al Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) en Bethesda, Maryland.
La vacuna nombrada ARNm-1273 entró en fase experimental, lo que se refiere al inicio de pruebas en seres humanos para verificar su efectividad. De ello se encargará investigadores del gobierno estadounidense.
Las primeras pruebas, sin embargo, no se realizarán sino hasta finales de abril, cuando se aplique a unos 20 a 25 voluntarios. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, explicó que se verificarán si dos dosis de la vacuna son seguras y si protege contra el coronavirus.
En julio o agosto estarán listos los primeros resultados, de acuerdo con lo previsto por los expertos en el área.
El desarrollo de ARNm-1273 se dio en una colaboración entre Moderna y el Centro de Investigación de Vacunas del NIAID (VRC): se trata de una vacuna que codifica una forma estabilizada de prefusión de Spike (S), una proteína seleccionada por la farmacéutica estadounidense.
Juan Andrés, director de Operaciones Técnicas y calidad de Moderna, expresó en un comunicado en línea: “Quiero agradecer a todos por su esfuerzo extraordinario en responder a esta emergencia de salud global con una velocidad récord. La colaboración a través de Moderna, NIAID y con el CEPI nos ha permitido entregar un lote clínico en 42 días desde la identificación de la secuencia”.
Epidemia en escala
El coronavirus no tiene un tratamiento específico, por lo que es tratado con medicamentos preexistentes para otras enfermedades, entre ellas el VIH. A propósito de los esfuerzos por conseguir una vacuna, Julio Castro, médico internista e infectólogo venezolano, afirmó en un contacto con El Tiempo Latino que una vacuna no es una solución para la epidemia actual, debido al tiempo que tarda en ser desarrollada.
Aunque el desarrollo del ARNm-1273 se consiguió en tiempo récord, aún se requiere que pase la fase de pruebas y verificación: lo cual implica unos seis meses de espera si todo marcha según lo previsto. Al mismo tiempo, los contagios dentro y fuera de China, país donde se originó la enfermedad, van en aumento sostenido.
Al cierre de esta edición, las autoridades chinas habían reportado más de 2 mil 600 muertos por COVID-19 y 77 mil pacientes con la enfermedad; mientras que aumentan los decesos y contagios en otros países, de Asia y Europa.
En Estados Unidos, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades pidieron a la población prepararse para una eventual propagación del coronavirus en el país, en el contexto de tener que aplicar cambios en sus rutinas y posibles pérdidas de ingresos.
Las autoridades estadounidenses cifraron en 53 los casos de COVID-19 en el país. De ese número, 36 son ciudadanos repatriado del crucero Diamond Princess.
Nancy Messonnier, directora del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias, destacó que la pregunta que se debe analizar actualmente es cuándo y a cuántas personas se contagiarán de coronavirus.
En Italia, esta semana el número de muertos escaló a 10, con 322 contagios confirmados. Mientras tanto, se registran nuevos casos en países como Francia y España, entre otros.
El virus provoca desde síntomas leves como fiebre y tos seca hasta una neumonía que puede causar la muerte. La enfermedad fue declarada una epidemia en China, donde hay ciudades enteras como Wuhan, epicentro del coronavirus, en cuarentena. Sin embargo, aún es pronto para hablar de una pandemia, que aplicaría en el ámbito global.
Con información de agencias.