La paciente, una mujer del condado de Solano, que no tiene antecedentes recientes de viajes a zonas afectadas por el brote o de contacto con otro caso confirmado, fue admitida inicialmente en el NorthBay VacaValley Hospital, un hospital comunitario de 50 camas en Vacaville, California, con síntomas parecidos a los de la gripe. Debido al deterioro de su condición, fue transferida cuatro días después al Centro Médico UC Davis.
Un caso que podría ser la primera señal de que la enfermedad puede estar propagándose dentro de una comunidad de EE.UU., según informaron este miércoles los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Hasta la fecha, nadie en el hospital comunitario ha dado positivo para el virus, pero las alarmas siguen encendidas en la comunidad.
La mujer no se sometió a la prueba de la enfermedad durante días, a pesar de una solicitud inmediata al CDC, porque no cumplía con los estrictos criterios de la prueba, según el Centro Médico de UC Davis, donde está siendo tratada.
El estado de California está llamando al caso, reportado por primera vez por The Washington Post, su primera instancia de transmisión comunitaria.
El personal allí la interrogó sobre los viajes y los contactos según las directrices de los CDC, pero ella no cumplía con los criterios de alguien que debería ser sometido a una prueba de detección del virus.
Por haberla tratado sin los parámetros de seguridad adecuados, el hospital vigila el estado de salud de decenas de miembros del personal que la atendieron. La mayoría está haciendo un seguimiento de su propia salud, pero el personal que tuvo contacto directo con la mujer ha sido sometido a pruebas de detección del virus. Hasta ahora, no ha habido pruebas positivas entre ellos.
El personal de NorthBay insertó un tubo en los pulmones de la mujer para ayudarla a respirar, un procedimiento que, según los expertos, aumenta el riesgo de exposición al virus porque puede aerosolizar las gotas respiratorias.
Con información de The Washington Post