El mundo a partir del desconfinamiento comienza a mostrar sus primeros cambios, los más notables en la reactivación de los locales como restaurantes y peluquerías, en los que evitar el contacto físico es casi imposible.
Los protocolos de mantenimiento y seguridad se han transformado desde la pandemia . “Al principio fue muy triste, especialmente por tener que despedir a nuestros empleados, aunque pudimos sobrevivir este tiempo con un menú para llevar y ofreciendo bebidas y cócteles para llevar”, dijo a la Voz de América Gilbert Martínez, responsable de un bar y restaurante de Brickell.
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Y es que esta adaptación pasa por las indicaciones colocadas en la entrada de los establecimientos, en las que se pide mantener la distancia social y usar la mascarilla. Solo se permite quitarse el tapabocas cuando se vaya a comer.
En algunos locales las medidas han ido más allá y han instalado máquinas expendedoras de gel para la desinfección de las manos, esto permitirá que tanto empleados como clientes se puedan sentir más seguros.
Martínez cree que nada volverá a ser como antes o por lo menos en su negocio, esto después de todos los protocolos que las autoridades de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) por sus siglas en inglés.
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Además de cambiar las normas dentro los locales, toda esta adaptación representa un reto al que la gente no está acostumbrada, pues la mayoría se sentirá extraña con tantas nuevas reglas y cuidados.
Sobre todos los preparativos, Martínez dijo a la Voz de América que se han informado, preparado y puesto en comunicación entre los diferentes locales.
Alternativa local
En medio de la planificación por volver a la actividad comercial y así hacer frente al impacto económico generado por el coronavirus en todo el mundo, un restaurante de Virginia decidió usar maniquíes en varias de sus mesas para hacer ver que el establecimiento cuenta con numerosos clientes.
Uno de los puntos a desarrollar por este tipo de establecimientos es la distribución de los comensales. A diferencia del pasado, la clave será aplicar el distanciamiento social y así evitar la expansión del poderoso brote.
