Este sábado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump anunció a Amy Coney Barrett como su candidata a la Corte Suprema para que ocupe la vacante que dejó libre la magistrada Ruth Bader Ginsburg tras su muerte.
El nombramiento del remplazo de Ruth Bader Ginsburg llegar en tiempo récord, en parte porque el mandatario prefería anunciar a su candidata antes de que se celebren las elecciones presidenciales del próximo 3 de noviembre, cita en la que enfrentará al demócrata Joe Biden, hasta el momento líder de las encuestas.
“Creo que usted está bien calificada para este puesto y será fantástica”, señaló desde la Casa Blanca Trump, quien destacó la experiencia de la magistrada.
“Ser juez requiere valor”, dijo el republicano. “Debería ser una reconfirmación directa y rápida”.
El Senado, de mayoría republicana, votaría a favor de la mencionada por el jefe de Estado, tal como lo adelantó el martes el senador Mitt Romney, quien anunció que seguirá “la Constitución y los precedentes al considerar al nominado del presidente. Si la nominación llega al pleno del Senado, planeo votar según sus calificaciones”.
Los republicanos son mayoría en el Senado, dueños de 53 escaños, y donde solo dos de sus integrantes se negarían a que Trump nomine a un nuevo magistrado para la instancia.
“Me siento muy honrada por la confianza que usted ha depositado en mí”, fue lo primero que Coney Barrett dijo una vez Trump le cedió la palabra. “Si soy confirmada, prometo ejercer este nuevo trabajo con todas mis habilidades”.
La jueza cerró diciendo a los estadounidenses que, en caso de ser confirmada, “asumiría este rol para servirles a ustedes. Nunca imaginé que estaría en esta posición, pero asumiré con coraje y humildad”
Más temprano, en entrevista con la cadena CNN, el senador demócrata Dick Durbin indicó que “considerando que esta aspirante a la Corte Suprema podría estar en el cargo 30 años es nada menos que indignante que quieran designarla en menos de 30 días”.
Conservadora
Coney Barrett, de 48 años de edad, también estuvo entre los nombres del presidente cuando fue elegido Brett Kavanaugh. Católica devota, cuenta con el apoyo de los conservadores religiosos.
Madre de siete hijos, rechaza el aborto.
De acuerdo con AP, Barrett fue nominada por el jefe de Estado en 2017 para la Corte de Apelaciones del 7mo Circuito Federal, confirmada por el Senado con una cerrada votación de la que salió airosa por 55 a 43.
En la instancia cuenta con el apoyo del juez Antonin Scalia, con quien trabajó como su asistente legal. Además, hizo las labores como abogada privada en la capital de Estados Unidos antes de regresar a la Universidad de Notre Dame en 2002 para convertirse en profesora.
Los demócratas del Senado ejercieron presión sobre su figura asegurando que su postura conservadora podría incidir sobre fallos vinculados al aborto.