Esta semana, los ojos del mundo miraron atónitos a la capital de Estados Unidos, donde la anarquía tomó forma y pudo más que la cordura. En Washington DC, un grupo de manifestantes que se encontraba en una concentración en apoyo al presidente Donald Trump se hizo a un lado para imponer su opinión por otras vías.
Contra todo pronóstico, el caos se apoderó del centro político de Estados Unidos y con él llegó la violencia.
La mayor democracia del planeta fue vulnerada. Las alarmas se encendieron y la última etapa de la administración Trump quedó manchada por la irregularidad de quienes se negaron a aceptar el triunfo de Joe Biden en las elecciones presidenciales del 3 de noviembre de 2020.
Llamado
El calendario marcaba el 6 de enero de este año como una fecha importante en territorio norteamericano. Para ese miércoles, el Congreso debía certificar la victoria de Biden, un formalismo tras el anuncio en diciembre por parte del Colegio Electoral, el cual dio como ganador en las urnas al demócrata; sin embargo, también estaba prevista una concentración en la capital del país por parte de los seguidores de Trump, quien el 3 de enero prometió “un día histórico”, haciendo mención a la movilización.
Esposado
48 horas antes del evento, uno de los más fieles simpatizantes del mandatario fue arrestado. Enrique Tarrio, líder del grupo ultraderechista Proud Boys, fue detenido por la policía de DC luego de que en diciembre robara de una iglesia de la capital una pancarta alusiva al movimiento Black Lives Matter, la cual quemó.
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Concentración
A primera hora del miércoles 6 de enero, cientos de personas a favor del llamado del presidente comenzaron a agruparse en Washington para apoyar las constantes denuncias (sin prueba) de fraude en las elecciones. La presión aumentó luego de que el republicano solicitó al vicepresidente Mike Pence frenar la certificación; no obstante, el funcionario aseguró que no sería un obstáculo en el proceso, pero prometió respetar la voluntad de los congresistas que pidieran someter a votación la certificación.

CAOS. Líderes empresariales se pronunciaron en contra del asalto al Congreso. | Foto: Efe.
Inicio del proceso
Poco después del mediodía, el Congreso dio comienzo a su acto. A pocos metros del edificio gubernamental, un grupo de seguidores de Trump llevó su concentración a los alrededores del Capitolio por llamado del propio mandatario, quien, durante su discurso en la capital, fue enfático: “Caminaremos hasta el Capitolio y vitorearemos a nuestros valientes senadores y congresistas”. Una vez ahí, los protestantes sobrepasaron las vallas de seguridad dispuestas por los cuerpos de seguridad. Su objetivo era ingresar a la estructura.
Asalto al Capitolio
No hubo fuerza que se resistiera ante la turba. Pasadas las 2:00 pm, los manifestantes lograron ingresar a la sede del Congreso. La situación ocurrió luego de que el mandatario indicara que “nunca cederá”, manteniéndose firme en su postura de no aceptar el revés en las urnas. Frente al hecho, la policía decidió evacuar las oficinas del lugar para evitar mayor peligro.
Directrices
Toda acción conlleva una reacción y la primera en pronunciarse fue la alcaldesa de DC, Muriel Bowser, quien decretó toque de queda para intentar aplacar la situación. La ordenanza entró en vigor desde las 6:00 pm del miércoles hasta las 6:00 am del jueves.
Decesos
Hombres disfrazados, manifestantes causando daños al Capitolio, y otro recorriendo el lugar con la bandera confederada. Las imágenes quedarán para la historia. El epicentro de la democracia nacional no encontraba paz y en sus entrañas se vio manchado con sangre. BBC confirmó hasta este viernes cinco muertos, dos de ellos perdieron la vida en la sede del Congreso: el agente Brian D. Sicknick y Ashli Babbitt, veterana de la Fuerza Aérea. Según la fuente, el primero cayó “debido a sus heridas mientras cumplía con su deber”, y la segunda recibió un disparo por parte de la policía del Capitolio.
SUCESO. Ashli Babbitt, de 35 años, fue asesinada a tiros en el Capitolio el miércoles. | Foto Cortesía de Timothy McEntee para The Washington Post.
Mensaje y bloqueo
A través de Twitter, el presidente Trump se pronunció sobre el asalto al Capitolio: “Estas son cosas y eventos que pasan cuando una victoria electoral arrolladora es arrebatada de manera tan abrupta y viciada a los grandes patriotas que han sido tratados tan injustamente y mal durante tanto tiempo. Vayan a casa y en paz ¡Recuerden este día para siempre!”. Su escrito fue eliminado por la red social y su cuenta fue bloqueada por 12 horas. En un comunicado, la compañía señaló que “como resultado de la actual situación de violencia en Washington DC hemos procedido a la eliminación de tres tuits de (la cuenta) @realDonaldTrump que fueron publicados hoy (miércoles) por repetidas y severas violaciones de nuestra política de integridad cívica”.
Reanudación
La violencia solo supuso una pausa en el Congreso, instancia que logró reunir nuevamente a sus representantes entrada la noche. Como estaba previsto, el triunfo de Biden fue oficializado, esta vez con el sinsabor de lo que se vivió horas atrás en el lugar.
Solicitud de salida
Las críticas sobre la figura de Trump no tardaron en llegar. Líderes demócratas se expresaron con contundencia y solicitaron que se aplicara la vigésima quinta enmienda contra el mandatario. Una de las personas que se expresó fue Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara Baja, quien indicó en rueda de prensa el jueves que “si el vicepresidente no actúa, procederemos a iniciar el proceso de ‘impeachment’. Es la voluntad de la mayoría de mi grupo. Y del pueblo americano, por cierto”. Desde el lado republicano, el legislador Adam Kinzinger se unió a la petición: “el presidente causó esto”, señaló sobre los actos violentos.
Renuncia de funcionarios
Lo ocurrido el 6 de enero en el Capitolio se tradujo como una oportunidad para abandonar la administración Trump. Dos de sus aliadas, la secretaria de Transporte Elaine Chao y la secretaria de Educación Betsy DeVos, renunciaron a sus respectivos cargos tras lo vivido en la capital, anuncios que llegaron a menos de dos semanas del fin del mandato del republicano.
Regreso de Trump a Twitter
El jueves, luego de que se cumplieran las 12 horas de suspensión en Twitter, el presidente volvió a manifestarse en la red social, esta vez con un video de poco más de dos minutos en el que condenó enérgicamente el asalto al edificio gubernamental y aseguró que quienes estuvieron detrás de los incidentes pagarán por lo sucedido. El jefe de Estado indicó sentirse “indignado” por lo visto el miércoles en la capital del país, hecho que calificó como un “ataque atroz” contra la sede del Congreso; no obstante, por primera vez reconoció su derrota en las elecciones del 3 de noviembre de 2020.
Balance
Tras lo ocurrido en los últimos días en DC, autoridades presentaron un balance de lo que dejó la violencia en el área. La toma del Congreso quedó marcada por cinco personas fallecidas, al menos 14 policías heridos y más de 60 arrestados. En una rueda de prensa nocturna, el jefe de la Policía de Washington DC, Robert Contee, precisó que dos de los 14 policías heridos sufrieron lesiones graves. Explicó que los arrestos ocurrieron no solo en el Capitolio sino en otras zonas de DC.