Por medio de un comunicado emitido este sábado, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés) informó que la Casa Blanca enviaría a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) a la frontera sur del país con el objetivo de prestar apoyo a los niños migrantes no acompañados que han llegado recientemente.
Alejandro Mayorkas, secretario del DHS, dijo en el comunicado que el apoyo se estará prestando durante 90 días para que los funcionarios de dicha entidad puedan recibir, hospedar y transferir a los infantes al Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (HSS por sus siglas en inglés) donde permanecerán, reportó The Hill.
“Estoy agradecido por el talento excepcional y la capacidad de respuesta del equipo de FEMA (…) Nuestro objetivo es asegurar que los niños no acompañados sean transferidos al HHS lo más rápido posible, de acuerdo con los requisitos legales y en el mejor interés de los niños”.
Esta semana, la Casa Blanca notificó que estaba trabajando en encontrar nuevos albergues donde los niños no acompañados puedan estar hasta que se resuelva su caso y dejen la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
No obstante, Mayorkas advirtió que las personas que quieran ingresar al país a través de “canales irregulares” serán detenidos y devueltos.
“Nunca es seguro venir a los Estados Unidos a través de canales irregulares, y esto es particularmente cierto durante una pandemia. (…) Para proteger de manera efectiva tanto la salud y la seguridad de los migrantes y nuestras comunidades de la propagación del COVID-19, a las personas detenidas en la frontera se les sigue negando la entrada y se les devuelve ”.
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Nuevos albergues
En las últimas semanas la administración del presidente Biden ha afrontado una creciente ola migratoria, específicamente de niños que han llegado solos a la frontera sur de Estados Unidos. Pese a que Biden se ha alejado de las duras políticas migratorias impuestas por el expresidente Donald Trump, el aumento de migrantes que intentan ingresar al país por vías no lícitas se ha convertido en un reto mayor en su gabinete.
Jen Psaki, secretaria de prensa de la Casa Blanca, anunció el martes que la administración de Biden se encuentra en la búsqueda de nuevas instalaciones para albergar a los niños migrantes que han llegado las últimas semanas a la frontera sur del país sin compañía alguna.
El deseo es poder garantizar que los infantes tengan acceso a la educación, la atención médica y los servicios legales. “Estamos buscando instalaciones adicionales donde podamos albergar a los niños de manera segura y asegurarnos de que tengan acceso a todos estos recursos”, dijo Psaki.
Sin consecuencias
La Casa Blanca aseguró que los padres o tutores de los menores indocumentados que se encuentran en la frontera no enfrentarán “consecuencias migratorias” por acudir a recogerlos. La finalidad de la medida es reducir el tiempo que pasan los niños en sus instalaciones.
Este viernes el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) informó que anuló una norma establecida por el Gobierno del expresidente Donald Trump en 2018 que generaba “un efecto disuasorio” para representantes indocumentados que temían recoger a los infantes por miedo a ser deportados.
Una portavoz de la entidad, que solicitó permanecer bajo anonimato, aseveró que “no habrá consecuencias migratorias para quienes se acerquen” a buscar a los niños y no tengan documentos.