El presidente Joe Biden pidió este lunes a los funcionarios locales y estatales que reconsideren el levantamiento de las restricciones contra el COVID-19, e instó que mantengan el uso de la mascarilla como una medida obligatoria. El mandatario hizo la solicitud debido al aumento de casos que ha presentado el país en los últimos días.
“Reitero mi llamado a todos los gobernadores, alcaldes y líderes locales para que mantengan y restablezcan el mandato de la máscara. Por favor, esto no es política. Restablezca el mandato si lo defrauda”, dijo durante su participación en un evento que tenía como objetivo resaltar la elegibilidad para vacunas, reseñó The Hill.
Biden alegó que los estados que han relajado las restricciones contra la pandemia deben detener dichos esfuerzos.
Desde su campaña a la presidencia, Joe Biden ha hecho un llamado a los ciudadanos y residentes para que se sumen al uso del tapabocas. Y tras su llegada a la Casa Blanca, el jefe de Estado solicitó que durante los primeros 100 días de su mandato se mantuviera el uso de la mascarilla para así evitar la propagación del virus mientras el país aumentaba el número de vacunados.
Sin embargo, distintos estados han comenzado a relajar las restricciones e incluso algunos han alegado que no es obligatorio el uso del tapabocas. Texas y Mississippi han sido uno de ellos, a lo que el presidente alegó que hacerlo es un “pensamiento neandertal”.
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Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) pidió a los estadounidenses no bajar la guardia, pues los números han vuelto aumentar y siente que el país puede estar ante una “fatalidad inminente”.
“Voy a perder el guión, y voy a reflexionar sobre la sensación recurrente que tengo de la muerte inminente. Ahora mismo tengo miedo. No podemos darnos el lujo de la inacción”, dijo la directora de los CDC, Rochelle Walensky, durante una sesión informativa en la Casa Blanca el lunes.
Estados Unidos ya superó los 30 millones de casos de COVID-19, mientras el número de contagios siguen aumentando.
Según Walensky, “el promedio de siete días de casos nuevos es de alrededor de 60.000 por día, un aumento del 10% con respecto a la semana pasada. Las cifras aún están muy lejos del pico de enero, pero el aumento se produce después de un período sostenido de estancamiento”, reportó The Hill.