Este miércoles, un grupo de senadores republicanos moderados informó que se están preparando a fin de ofrecer su propia propuesta para reformar la infraestructura de la nación, pues buscan recortar significativamente los aproximadamente $2 billones solicitados por el presidente Biden en su propuesta de ley.
Se espera que la alternativa republicana cueste menos de la mitad del plan de la Casa Blanca, según los legisladores del partido. En los últimos días han sugerido que el precio total podría ser entre $600 mil millones y $800 mil millones.
Los republicanos moderados también se han comprometido a limitar su enfoque, para incluir solo los elementos que consideran infraestructura tradicional, como carreteras y puentes; a su vez, descartan los aumentos de impuestos corporativos con los que Biden esperaba financiar su plan.
Las discusiones parecen estar en curso entre un grupo de 10 republicanos, incluidos los senadores Shelley Moore Capito, Mitt Romney y Bill Cassidy.
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Romney dijo a los periodistas que el proceso aún se encuentra en sus “primeras etapas”, aunque señaló que los republicanos posiblemente lo discutirán este jueves 15 de abril. También comentó que los líderes republicanos podrían eventualmente tratar de comprometerse con 10 demócratas de tendencia centrista para ampliar su coalición.
La propuesta inicia en un momento en el que Biden se esfuerza por negociar con los republicanos, en todo el país, con la esperanza de lograr un acuerdo bipartidista sobre su plan de infraestructura.
Los republicanos moderados en el Senado, que recientemente se han propuesto elaborar su plan de infraestructura, pertenecen a un grupo bipartidista de 20 legisladores que logró romper un estancamiento y aprobar un estímulo de $900 mil millones a finales de diciembre.
Con información de The Washington Post.
