Un tiroteo a primera hora de la mañana en un restaurante y bar de Kenosha, Wisconsin, dejó tres muertos y dos personas hospitalizadas con heridas graves, informaron las autoridades.
El sospechoso, descrito como un hombre afroamericano de más de 6 pies de altura (1,82 m) con una sudadera con capucha de color claro, todavía está prófugo, señaló el Departamento del Sheriff de Kenosha en un comunicado de prensa.
Los funcionarios dijeron que creen que el tiroteo en la taberna de Somers House fue un incidente aislado; y que el pistolero no representaba una amenaza adicional para la comunidad.
Peter Ploskee, de 44 años, quien ha vivido al otro lado de la calle del local toda su vida, le dijo a The Washington Post que nunca había ocurrido nada parecido al tiroteo. El bar es frecuentado por estudiantes que asisten a Carthage College, a menos de media milla por la carretera, y otros lugareños.
Ploskee dijo que estaba acostumbrado a los sonidos de la música fuerte y las discusiones de la taberna, pero no a los disparos.
El testigo contó que estaba descansando después de un largo día de trabajo, como mecánico y especialista en tecnología de la información, cuando escuchó alrededor de 15 disparos en un lapso de pocos minutos.
Precisó que vio desde su puerta lo que parecía ser un tiroteo entre dos personas.
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“Un hombre recibió un disparo y cruzó la calle corriendo (...) Cayó al suelo y falleció frente a la barra. Alguien más murió en el patio”.
Ploskee dijo que la gente salió corriendo del bar en todas direcciones, gritando y llorando. Algunos de ellos se refugiaron en su jardín delantero.
Las autoridades llegaron minutos después del primer disparo y cerraron las carreteras del área. No precisaron de inmediato los nombres y edades de las víctimas.
Ha habido alrededor de 150 tiroteos masivos en los Estados Unidos en lo que va de 2021, según datos del Gun Violence Archive.
Fuente: Lateshia Beachum/The Washington Post.
Traducción libre del inglés.
