El uso obligatorio de mascarillas dentro de la Cámara de Representantes seguirá vigente hasta que todos los miembros estén vacunados en su totalidad. Así lo informó el médico del Congreso Brian Monahan en un comunicado.
“El requisito actual de mascarilla y otras pautas permanecen sin cambios hasta que todos los miembros y el personal de piso estén completamente vacunados”, escribió Monahan.
Pese a la autorización de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la entidad insta al uso obligatorio del cubre bocas por prevención, pues se estima que el 75% de los miembros de la Cámara están vacunados.
Asimismo, Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara, informó que no volverán a las operaciones normales hasta que todos tengan las dosis correspondientes.
Sin embargo, aquellos miembros que ya están completamente vacunadas “son libres de ir sin máscara en los edificios de oficinas de la Cámara y en otros lugares del Capitolio”, detalla el memo.
Los republicanos han expresado su descontento con la medida, y un grupo instó a Pelosi este viernes a levantar el requisito.
En una carta abierta, los miembro del partido opositor dijeron que “es hora de actualizar nuestras propias regulaciones en el lugar de trabajo. El Congreso de Estados Unidos debe servir como modelo para mostrarle al país que podemos reanudar la vida normal a través de la vacunación. Sigamos la ciencia y volvamos al trabajo”. La misiva estuvo liderada por Bob Gibbs.
The Hill informó que una encuesta publicada por CNN reveló que todos los demócratas de la Cámara ya están vacunados. Sin embargo, “menos de la mitad de los republicanos de la Cámara lo han reconocido públicamente. Todos menos cuatro de los 50 republicanos del Senado confirmaron que están vacunados”.
Anuncio de los CDC
Los estadounidenses que están completamente vacunados pueden transitar sin mascarillas ni distanciamiento físico en la mayoría de los casos, incluso cuando están en interiores o en grupos grandes, dijeron funcionarios federales el jueves, allanando el camino para una reapertura total de la sociedad.
El cambio representa un gran cambio simbólico y prácticamente para los estadounidenses cansados por la pandemia, millones de los cuales han vivido con las restricciones durante más de un año. Un número creciente se ha quejado de que no puede hacer más incluso después de estar completamente vacunado y criticó a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) por ser demasiado cautelosos. Más de 117 millones de estadounidenses están ahora completamente vacunados, o alrededor del 35% de la población.
Los funcionarios de los CDC citaron un creciente cuerpo de evidencia del mundo real que demuestra la eficacia de las vacunas contra el coronavirus y señalaron que las inyecciones ofrecen protección incluso contra variantes más contagiosas que circulan en los Estados Unidos. Dijeron que también tuvieron en cuenta la disminución de los casos en el país y la rareza de las infecciones en las personas que están completamente vacunadas. No obstante, los funcionarios advirtieron que las pautas podrían cambiar nuevamente si la pandemia empeorara.
