La administración de Joe Biden invertirá $785 millones adicionales para detener la propagación del COVID-19 en poblaciones vulnerables de todo el país. Los fondos estarán dirigidos a atender zonas rurales, comunidades afroamericanas y organizaciones comunitarias.
Con los fondos se estima promover confianza en las vacunas y ayudar a establecer una fuerza de trabajo de salud pública más diversa, anunciaron las autoridades el miércoles.
El contexto: Añadió que el dinero adicional se sumará a los miles de millones de dólares ya invertidos en programas centrados en la equidad por la administración para proteger a las comunidades más afectadas y de mayor riesgo ante el COVID-19.
- La financiación contribuirá a crear una cantera de trabajadores de la salud pública en las comunidades más desatendidas.
- El Servicio de Salud Indígena dispondrá de dinero para contratar a más enfermeras escolares y las organizaciones comunitarias contarán con más recursos para ayudar a superar las barreras que impiden la vacunación en las comunidades desatendidas.
- Un grupo de trabajo de la Casa Blanca entregó un informe final el miércoles y más del 80% de sus recomendaciones se han aplicado, afirmó Marcella Nunez-Smith, presidenta del Grupo de Trabajo de Equidad Sanitaria COVID-19.
- La Casa Blanca se ha propuesto tratar de cerrar la brecha en la forma en que las diferentes poblaciones han sido impactadas por la pandemia, particularmente con las vacunas. Para Nunez-Smith y Zients estos esfuerzos han sido exitosos.
¿Qué dicen? "Los fondos apoyarán a las comunidades tribales que lideran la mitigación de la propagación del virus y también protegerán a las personas con discapacidades de la infección y las ramificaciones de la pandemia", informó Nunez-Smith, durante una conferencia de prensa.
- “Los recursos apoyarán a las organizaciones comunitarias que promueven la vacunación en las comunidades de afroamericanosr, las zonas rurales y las poblaciones de bajos ingresos”, añadió Nunez-Smith.
- El coordinador de la respuesta COVID-19 de la Casa Blanca, Jeff Zients, añadió que la financiación adicional es una respuesta directa a las recomendaciones del grupo de trabajo para ayudar a erradicar las disparidades de salud y apoyar a las comunidades desatendidas.
- "La equidad sanitaria es una misión crítica para la administración Biden-Harris", dijo Nunez-Smith. "No hay un camino creíble hacia una nueva normalidad sin ella".
- "Tenemos más trabajo que hacer, pero este es un progreso significativo sobre el que podemos construir", concluyó Zients.
Los datos: En octubre un informe del Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos afirmó que el COVID-19 mató a un número desproporcionado de afroamericanos, latinos y nativos americanos del país el año pasado y exacerbó las disparidades de salud entre los grupos, concluye un nuevo estudio.
"Las disparidades raciales/étnicas en el riesgo, la hospitalización y la muerte por COVID-19 se han atribuido a determinantes estructurales y sociales de la salud con raíces establecidas y profundas en el racismo", cita el estudio del Instituto de Cáncer.
- Las muertes entre los afroamericanos, latinos y nativos americanos fueron de dos a tres veces más altas en comparación con la población de origen blanca y asiática.
- Según el estudio, las disparidades fueron similares cuando se tuvieron en cuenta las 61 mil 200 muertes que no se atribuyeron a COVID-19.
- Las muertes de afroamericanos y los nativos eran de tres a cuatro veces más altas, mientras que entre los latinos fueron casi dos veces más altas, en comparación con las poblaciones blancas, afirma el estudio.
- En contraposición la encuesta más reciente de la Fundación de la Familia Kaiser mostró que el 73% de los adultos afroamericanos, 72% de los blancos y el 70% de los hispanos se habían vacunado al menos por primera vez a mediados de octubre, informó Zients.
Fuente principal de la noticia: The Hill