Cuando la condesa alemana Karlotta Liebenstein murió en 1992, su millonario fideicomiso fue heredado por el ser más especial para ella: su perro Gunther III. Desde entonces, un grupo de cuidadores se ha dedicado a mantener el estilo de vida de una generación de perros. El actual, Gunther VI, puso a la venta el pasado miércoles una casa en Miami por 31,75 millones de dólares y que previamente le perteneció a Madonna en la década de 1990.
La casa, con vista al mar, tiene ocho habitaciones. Cuenta con muelle privado, jardines, piscina y una superficie total de casi 4.800 metros cuadrados.
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Hace dos décadas la estrella pop la vendió por 7,5 millones de dólares. Ahora vale mucho más. El condominio también tiene un retrato enmarcado en oro de Gunther IV sobre la chimenea de la sala.
Una de las principales cuidadoras del perro es Carla Riccitelli, quien forma además parte de la junta que administra el fideicomiso que ahora vale casi $500 millones, y que decide cuándo comprar y vender bienes raíces
El mercado inmobiliario de Miami está tan activo, y con un inventario tan limitado, que los supervisores del fideicomiso decidieron que era un momento oportuno para vender.
El estilo de vida de este canino incluye viajes a Milán y las Bahamas, donde el último Gunther recientemente cenó en restaurantes todas las noches; a sus manejadores les gusta asegurarse de que esté bien socializado. Aunque la mayor parte de su tiempo la pasa en la Toscana, Italia.
La junta incluso ha comprado equipos deportivos, incluido un equipo de fútbol masculino y un equipo de natación femenino. Gunther jugó en el campo y asistió a los encuentros, explicó Riccitelli, quien conoce al grupo que cuida al perro hace 30 años.
Ahora, Gunther se pasea por esta mansión, esperando a su siguiente dueño.
Con información de Associated Press y Forbes.
