En entrevista exclusiva para El Planeta, Thomas Perls —miembro de la Facultad de Medicina de Boston y experto en la genética del envejecimiento— conversó sobre las tendencias de mortalidad de la población estadounidense, la calculadora de vida que creó y cómo las mujeres hispanas son las personas que viven más en el país.
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¿Por qué es importante? La pandemia cambió y afectó el promedio de vida en los estadounidenses, especialmente entre personas de la tercera edad y aquellas con condiciones de salud pre-existentes. Sin embargo, las causas de muerte fuera del COVID-19 siguen presentes y afectan principalmente a las personas en edad laboral —entre los 25-64 años—.
- Según el Centro de Control de Enfermedades y Prevención (CDC) para 2019 la mortalidad de los latinos representó un total de 212,397 muertes —350.7 muertes por cada 100 mil habitantes—. Son la 3era minoría étnica con mayor cantidad de muertes por cada 100 mil habitantes.
Contexto. El Planeta de Boston ya le había dado cobertura a la calculadora de mortalidad creada por Thomas Perls en 2015. Mediante una encuesta que considera hábitos, raza y detalles de tu salud, puede calcular a qué edad estimada una persona puede fallecer y qué hacer para aumentar la longevidad, por lo que en septiembre de este año decidieron conversar sobre los detalles de sus estudios.
- Una de las observaciones más resaltantes que hizo el experto es sobre el promedio de vida de las mujeres hispanas, señalando que son las más longevas dentro de la población estadounidense. “La esperanza de vida promedio de las mujeres hispanas en EE.UU. es de aproximadamente 84 años… viven ocho años más que el promedio estadounidense. Creo que parte de eso podría ser la genética”, explica Perls.
- Agrega que pueden existir genes en las mujeres hispanas que retrasan el envejecimiento y disminuyen las enfermedades —en comparación con otras razas dentro del país—. “Gran parte puede ser también cultural, pues los hispanos son más activos cognitivamente a edades más avanzadas”, señala el doctor.
- Sí existe una diferencia de longevidad entre razas y etnias en Estados Unidos, pero Perls explica que también influyen factores externos. “En gran parte son tendencias socioeconómicas. Aquellos que tienen mayor educación tienen un mejor acceso al servicio médico y conocen más acerca de los beneficios del ejercicio físico y la dieta”, agrega que el servicio médico no está al alcance de todos y que las personas más pobres tienden a tener vidas menos saludables debido a su acceso a recursos.
El experto en epidemiología y genética explicó que realmente Estados Unidos no tiene un promedio de vida alto si se compara con otros países —por ejemplo San Marino o Hong Kong cuyo promedio en mujeres supera los 86 años, y los 82 en hombres—, pero resalta que la mortalidad del humano en general no es de 90 años. Recuerda que la mejor forma de mejorar la longevidad es con hábitos saludables que incluyen alimentación, ejercicio y acceso a servicios médicos de calidad.
