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Cinco cosas sobre Ómicron que quiero que sepan mis amigos y mi familia

Anders Fomsgaard, one of Denmark's most well-known virologists, says the world is "five steps behind" the coronavirus. MUST CREDIT: Washington Post photo by Chico Harlan.

(c) 2021, The Washington Post - Dan Diamond

Como reportero de salud que ha publicado sobre el coronavirus desde principios de enero de 2020, a menudo recibo preguntas sobre la pandemia. Pero después de que surgió la variante Ómicron el mes pasado, esas preguntas se volvieron tanto más urgentes, con algunos lectores quejándose de mensajes contradictorios sobre la nueva variante y las vacunas existentes, como francamente personales, ya que amigos y familiares están planificando sus vacaciones de invierno.

Durante el fin de semana, publiqué en Facebook tratando de resumir lo que he escuchado de expertos y funcionarios que intentan luchar contra la nueva variante. Lo que sigue es una versión ligeramente editada de esa publicación.

1. Es posible que Ómicron no sea "suave" para los no vacunados.

La variante Ómicron es real, y los informes de que es "más leve" están basados principalmente en casos de infecciones denominadas de irrupción, las cuales son generalmente leves ya que por definición afectan a personas vacunadas o previamente infectadas.

Si usted ha sido vacunado y ha recibido su refuerzo, hay motivos para esperar que su infección por Ómicron produzca síntomas mínimos.

Si no ha sido infectado anteriormente y no ha sido vacunado, todavía no hay razón para esperar un caso "leve".

Los expertos han advertido, una y otra vez: la mayor parte de los casos los sufrirán los estadounidenses que siguen sin vacunarse, los que hayan perdido la inmunidad de sus vacunas anteriores, los que aún no se han colocado la vacuna de refuerzo o los que estén inmunodeprimidos.

Por otro lado, cualquiera que asegure que Ómicron seguramente resultará en casos leves para los vacunados es demasiado optimista. Nuevamente, hay buenas razones para esperar que sea así, pero no tenemos los datos para saberlo con certeza. Esta variante apenas se detectó hace un mes. Los investigadores aumentan sus esfuerzos para mantenerse al día y estudiar el virus en tiempo real.

Y las noticias que nos llegan desde el extranjero no siempre son claras, especialmente porque la demografía en el sur de África, donde el Ómicron surgió por primera vez, no se alinea perfectamente con la población estadounidense de mayor edad.

2. Este preparado para un resultado positivo de la prueba. Las mutaciones de Ómicron hacen que sea muy transmisible.

Muchas, muchas personas que están vacunadas o que fueron infectadas previamente darán positivo en las próximas semanas, dada la pura transmisibilidad y capacidad de la variante Ómicron para evadir anticuerpos.

Todos los expertos que he entrevistado, incluidos algunos de los principales funcionarios de salud del país, han ajustado su forma de pensar y ahora se están preparando mentalmente para dar positivo después de pasar dos años esquivando el virus. Los casos de "infecciones de irrupción" se normalizarán rápidamente, si es que aún no lo han hecho.

En pocas palabras, mientras que las cepas anteriores del virus se frenaron a nuestros pies si estábamos "completamente vacunado" o previamente infectados, Ómicron puede ingresar a nuestros cuerpos. Aún así, las vacunas y los refuerzos tienen el poder de eliminar las peores consecuencias de Ómicron y combatir las infecciones. Es posible que algunas personas que leen esto ya tengan Ómicron en este momento y no lo sepan porque su sistema inmunológico está haciendo un buen trabajo conteniendo la infección y los síntomas son mínimos o inexistentes.

3. Esto es exactamente para lo que sirven las vacunas de refuerzo.

Las vacunas de refuerzo pueden ayudar específicamente a restaurar sus anticuerpos a un nivel adecuado, como los porteros de un club, para evitar que Ómicron ingrese.

Para hacer énfasis en este punto: las vacunas de refuerzo son una de las mejores herramientas para defenderse de Ómicron, según lo indica cada estudio hasta la fecha.

También tenemos mejores pruebas que a principios de 2020, aunque Estados Unidos cometió un error al no garantizar el acceso a pruebas rápidas, como lo ha experimentado cualquiera que esté buscando una prueba rápida ahora. Existe un tratamiento con anticuerpos monoclonales que parece funcionar aún contra Ómicron, pero hay escasez de este medicamento.

4. Probablemente los hospitales se llenen hasta su máxima capacidad.

Los funcionarios federales se están preparando para que las infecciones estadounidenses se disparen a partir de enero del 2022, con cifras que podrían superar los 500.000 casos nuevos por día. (El pico anterior fue de 250.000 casos por día en enero de 2021). Algunos expertos predicen tasas diarias de casos que podrían ser mucho más altas, porque muchos estadounidenses vacunados darán positivo, aunque es posible que no captemos todos los datos de las personas que se realizan sus pruebas en casa.

Incluso si sólo un pequeño porcentaje de esas personas necesita atención hospitalaria, le sumará presión a un sistema de salud que ya está luchando contra la fatiga pandémica y aún está lidiando con casos relacionados a la anterior variante, Delta. También será un golpe psicológico después de la intensidad de los últimos dos años de lucha contra la pandemia, por lo cual las empresas, familias y demás seguramente tendrán que apresurarse en ajustar sus planes.

5. Utilice una mascarilla correcta y piénselo dos veces antes de correr riesgos. Este mes será crucial.

Los funcionarios esperan que el pico de la ola de infecciones por Ómicron termine a principios de febrero.

Un aumento en los casos de Covid es seguido días después por un aumento en las hospitalizaciones, y esto es seguido días después por un aumento en el número de fallecidos. Éste ha sido el patrón durante los últimos dos años.

Como resultado, el próximo mes en Estados Unidos podría ser más grave que los peores días de la pandemia, ya que una gran ola de nuevos casos se volcará sobre nuestro país. Todos los expertos con quienes hablé están reprogramando sus planes, y varios hicieron la recomendación de que no se deben correr riesgos que puedan requerir visitas a un consultorio médico o a la sala de emergencias de un hospital en un momento en el cual la demanda en nuestro sistema de atención médica va a aumentar.

Si está pasando por un aeropuerto o una estación de tren, sin duda está expuesto a alguien con Ómicron en este momento.

Como alguien que ha recibido su vacuna de refuerzo y usa una mascarilla N95 en espacios interiores, siento que estoy tomando las mejores precauciones que puedo. También estoy cansado de la pandemia y había comenzado a retomar pasatiempos como nadar, ir al cine y cenar con amigos.

Pero para mí, la variante Ómicron significa que voy a pausar algunas de esas actividades y me aseguraré de tener siempre una mascarilla de alta calidad para navegar entre multitudes y espacios interiores. Incluso si las infecciones son inevitables, no quiero ayudar a propagar Ómicron, especialmente hasta que obtengamos más datos en las próximas semanas. Y no quiero enfermarme sin saberlo y transmitir una infección a los miembros de mi familia en esta temporada de fiestas.

Información del Autor:

Dan Diamond es periodista nacional de salud para el Washington Post. Se unió al Post en 2021 después de cinco años en Politico, donde ganó el premio George Polk por investigar las medidas de la administración Trump frente a la pandemia del coronavirus.

Lea el artículo original aquí.