Los satélites Starlink siguen en el ojo del huracán. En una denuncia enviada al Secretario General de la ONU, António Guterres, China reveló que su estación espacial ha tenido que realizar dos maniobras evasivas para evitar colisiones con los satélites de SpaceX. Tras los “encuentros cercanos”, las redes sociales asiáticas fustigaron a la compañía aeroespacial fundada por el multimillonario Elon Musk.
¿Qué hay para ver? Los “casi” accidentes ocurrieron en julio y octubre respectivamente, cuando la estación china Tiangong tuvo que cambiar de curso de forma preventiva.
- El módulo principal de la estación Tiangong se puso en órbita el 29 de abril, un poco menos de dos meses antes del percance. Beijing afirma que los encuentros "constituían peligros para la vida o la salud de los astronautas a bordo de la estación espacial china".
- El 17 de junio China lanzó su primera misión tripulada en cinco años y la primera que llegaría a su estación. Según el documento dirigido a la ONU, la primera maniobra evasiva ocurriría dos semanas después: el 1 de julio. El segundo ocurriría el 21 octubre.
¿Viejas mañas en órbita? A pesar de que SpaceX confía en los sistemas de maniobras automáticas de Starlink, esta no es la primera vez que se ven involucrados en un episodio de controversia.
- Meses atrás distintos astrónomos denunciaron que los satélites comerciales afectan investigaciones y dificultan las tomas de imágenes. “La proliferación de constelaciones de satélites artificiales perjudica la observación astronómica”, reiteró la Sociedad Española de Astronomía (SEA) en una reunión científica en julio de 2020.
- Antes, en septiembre de 2019, el satélite de observación de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), Aelus, también hizo una maniobra evasiva para evitar el impacto con otro de los satélites de SpaceX. "Por primera vez, la ESA ha realizado una 'maniobra para evitar colisiones' para proteger a uno de sus satélites de colisionar con una 'mega constelación'", comunicó la agencia en su cuenta de Twitter.