Los combates entre grupos guerrilleros rivales a lo largo de la frontera entre Colombia y Venezuela han causado decenas de muertos y miles de desplazados. La escalada de violencia no se veía en ese país desde los históricos acuerdos de paz hace cinco años.
El contexto: Al menos 23 personas murieron por la violencia entre grupos armados de izquierda en el departamento de Arauca, al noreste de Colombia, durante el primer fin de semana de enero.
- A finales de mes, un coche bomba explotó frente a un edificio en el que estaban reunidos más de 40 líderes sociales en un taller de autoprotección, hirió a decenas de personas y mató a un guardia de seguridad.
- La semana pasada, el líder comunitario de Arauca Álvaro Peña Barragán fue asesinado a tiros en la casa de su hermano. Era el duodécimo líder social que murió en Colombia este año.
- Al día siguiente, a su viuda también la mataron unos pistoleros que ingresaron a casa de su suegra.
- El martes, hombres armados entraron en la casa del líder comunitario de Arauca, Hermán Naranjo Quintero, y lo secuestraron el día en que una Comisión de Paz del Senado visitaba el departamento. Su cuerpo fue encontrado el miércoles.
¿Qué dicen? "Le han declarado la guerra al movimiento social", denunció Eliécer Calderón, presidente de una junta de acción comunal en la zona rural de Arauca, que huyó a Bogotá la semana pasada tras ser amenazado en su casa. "Hemos tenido que salir con miedo a que nos maten, con miedo a que nos desaparezcan".
- Líderes y residentes en esta comunidad fronteriza dicen que viven un terror como nunca han experimentado desde el acuerdo de paz de 2016 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
- "La vida de muchas personas depende de las alianzas entre grupos armados", dijo Juan Pappier, investigador principal sobre las Américas para Human Rights Watch. "Cuando estas alianzas se rompen, sus vidas se vuelven miserables".
- "Hace muchos años que se gesta un conflicto en el departamento, pero no al nivel de lo que ocurre hoy", afirmó Yessid Robles, miembro de una red de defensores de los derechos humanos en Arauca. "Esperábamos una arremetida de las disidencias, pero no un carro bomba que intentara matar a más de 50 civiles".
Los datos: Al menos 66 personas murieron en enero en Arauca, un departamento con una población de unos 260 mil habitantes y al menos 1 mil 200 personas fueron desplazadas por la violencia, según la Defensoría del Pueblo de Colombia.
- En lo que va de año han sido asesinados 17 líderes sociales en Colombia, uno de los países más peligrosos del mundo para los defensores de los derechos humanos y los activistas medioambientales por su violencia.
¿Por qué es importante? Los defensores de los derechos humanos acusaron a las fuerzas de seguridad venezolanas de atacar a los civiles y llevar a cabo ejecuciones extrajudiciales en su esfuerzo por encontrar a los guerrilleros disidentes, mientras que también dejaron supuestamente que el ELN operara libremente en la zona para beneficiarse de sus actividades de narcotráfico.
La ofensiva militar venezolana hace huir a miles de personas. El gobernante del régimen venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que los grupos guerrilleros colombianos forman parte de un esfuerzo del gobierno de Duque por desestabilizar Venezuela. Las autoridades colombianas han negado esta afirmación.
- Los líderes de la sociedad civil dicen que es alarmante que la arremetida sea en contra de los líderes sociales y los defensores de los derechos humanos.
- Tanto las disidencias de las FARC como el ELN amenazan y asesinan a líderes locales a los que acusan, a menudo sin pruebas, de tener vínculos con el bando contrario.
- Las FARC disidentes y el ELN también han intentado reclamar territorio al otro lado de la frontera, en el estado venezolano de Apure.
- Maduro lanzó una ofensiva militar contra las facciones disidentes de las FARC en la región selvática a lo largo del río Arauca el pasado mes de abril y causó una oleada de refugiados que huyeron a Colombia.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post