Tres senadores republicanos dejaron de lado la línea trazada por el líder de la minoría Mitch McConnell y decidieron darle su voto a la jueza Ketanji Brown Jackson, que está en camino a ser confirmada y convertirse en la primera mujer negra en integrar la Corte Suprema de Estados Unidos.
Pero la decisión de los senadores Susan Collins, Lisa Murkowski y Mitt Romney envía también un mensaje a los integrantes del Congreso: hay que volver al bipartidismo y dejar de lado las líneas partidistas.
La política en las audiencias de confirmación. Los tres senadores rechazaron las actitudes que tomaron sus colegas durante los cuatro días de audiencias de confirmación.
- En dos de ellas, en las que los senadores tenían la oportunidad de interrogar a Jackson, los republicanos se centraron en temas como la teoría crítica de la raza y la participación de mujeres transgéneros, que movilizan a sus votantes de base, pero que está lejos de las preguntas de filosofía judicial que debe ser considerado en las audiencias de confirmación.
- “Algunos no fueron muy buenos. Creo que hubo un nivel de ataque personal que no estaba justificado”, dijo la senadora Murkowski a los periodistas sobre la postura de sus colegas, los senadores Josh Hawley y Ted Cruz.
- En sus comunicados en apoyo a Jackson, tanto Collins como Murkowski criticaron la politización del proceso de revisión de nominados a la Corte en ambos lados del pasillo. “Empeora cada año y se aleja más de la realidad”, acotó Murkowski.
- Collins señaló que, a su juicio, el proceso “está roto” y que el Senado debe “examinar la experiencia, las calificaciones y la integridad del candidato”. “No es para evaluar si un candidato refleja la ideología de un senador individual o si gobernaría exactamente como lo desearía un senador individual”, enfatizó.
Un cambio de enfoque. Collins espera que su voto ayude a bajar la temperatura partidista en los procesos de confirmación al Senado.
- En las décadas recientes, las votaciones se han centrado en lo impuesto por el partido, en comparación a momentos anteriores. Por ejemplo, el difunto juez Antonin Scalia, nominado por el presidente Ronald Reagan, fue confirmado 98 a 0 en 1986. La difunta juez Ruth Bader Ginsburg, nominada por el presidente Bill Clinton, fue confirmada 96 a 3 en 1993.
- “En primer lugar, las personas deben ignorar a grupos como Demand Justice que los presionan para que voten de una forma u otra sobre los jueces de la Corte Suprema”, alegó la senadora Collins, sobre este grupo progresista que había pedido el retiro del juez Breyer y compró publicidad por un millón de dólares para apoyar la nominación de Jackson.
- “En segundo lugar, debemos volver a lo que el Congreso delinea claramente como el papel del Senado frente al presidente”, continuó, refiriéndose a una “considerable deferencia”, que se le debe otorgar al presidente con los nominados a la Corte, independientemente del partido.
- El senador Romney se hizo eco de las preocupaciones de Collins con respecto al partidismo intenso que ha rodeado los últimos procesos de confirmación. “La verdadera pregunta para mí será cuando tenga un partido en el poder en el Senado que sea diferente al presidente, ¿cómo vamos a llenar el poder judicial? Es por eso que creo que la senadora Collins planteó los problemas que planteó”, recogió The Hill.
- “Nos dirigimos a un lugar que creo que es peligroso para los tribunales”, afirmó Murkowski al respecto.
La polarización gana. Aunque los senadores Collins, Murkowski y Romney, del lado republicano, y los senadores Joe Manchin y Kyrsten Sinema, demócratas, planteen cuestiones en las que son necesarias para que el bipartidismo vuelva a funcionar, no es sencillo. La polarización política parece ser más fuerte que la dinámica en el Capitolio.
“En muchos sentidos, el Congreso en este momento refleja una América cada vez más polarizada. Así que creo que comienza en casa cuando la gente se da cuenta de que necesitamos trabajar juntos para identificar problemas comunes y ser más respetuosos y civilizados en nuestro diálogo”, indicó la senadora Collins.
Con información de The Hill