Un médico acusado de asesinar 14 pacientes con fentanilo fue presentado el martes 12 de abril en una corte del estado de Ohio.
¿Qué fue lo que pasó? El médico William Husel fue acusado por supuestamente asesinar con excesos del analgésico fentanilo en un período de 3 años y medio.
El escándalo se dio a conocer primeramente en el 2018 con el informe de solamente 3 muertes de pacientes, luego en total se sumaron por lo menos 34 personas que recibieron dosis excesivas del analgésico. El médico de 44 años tuvo 25 cargos de asesinato, pero los fiscales retiraron 11.
- La droga utilizada es un opioide sintético significativamente más poderoso que la morfina, muy utilizado para aumentar el potencial adictivo de las drogas ilegales.
- No obstante, el fentanilo es mortal y en el ámbito médico permite un alivio del dolor crucial para la atención al final de la vida. Los pacientes pueden morir sin jadear por aire.
- Un estudio demostró que en el hospital las medidas de seguridad eran inadecuadas para evitar una dosis excesiva, causada por algún miembro del personal como Husel.
- Todo aconteció en el hospital Mount Carmel West de Ohio, que se ha visto obligado a despedir a 23 empleados, entre ellos, su director ejecutivo, director clínico y el director de farmacia.
¿Y ahora qué? Husel es acusado de cargos como homicidio culposo y a la vez también fue demandado el sistema hospitalario.
- En su defensa el médico dice que las dosis eran necesarias para permitir una muerte cómoda y digna. Además, aseguró que ninguna de las dosis fue administrada en secreto porque fueron aplicadas por enfermeras.
- Husel asegura que es un chivo expiatorio del hospital después que este se dio cuenta de las fallas sistémicas en juego.
- Al menos 25 enfermeras enfrentan medidas disciplinarias. Diez de ellas presentaron una demanda contra el hospital y su empresa matriz, diciendo que habían brindado atención compasiva.
Lo que dicen. “¿Por qué este hombre arriesgaría a su familia, su carrera, 17 años de tratar de ser médico, todo por lo que ha trabajado, para acelerar la muerte de alguien o para matarlo?”, preguntó el abogado defensor José Báez durante los alegatos finales.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post.