El gigante de los cosméticos, Revlon, se declaró en bancarrota mientras intenta salir de su pesada deuda, en medio de precios altos e interrupciones en la cadena de suministro.
La empresa se acogió al Capítulo 11 de la protección por bancarrota, amparo con el que puede continuar operando mientras reorganiza su deuda pendiente.
La multinacional de 90 años informó en un comunicado que espera $575 millones en financiamiento si el plan obtiene la aprobación de la corte. Los fondos adicionales apoyarán las operaciones diarias de la empresa.
La histórica empresa es conocida por una variedad de marcas de cosméticos y cuidado de la piel, incluido el favorito de las farmacias Almay y la marca premium Elizabeth Arden, que Revlon adquirió en 2016 después de vender más de $2 mil millones en préstamos y bonos.
La empresa estadounidense es controlada por MacAndrews & Forbes del multimillonario Ronald Perelman.
Crisis creciente
Antes de la crisis del coronavirus, Revlon enfrentó una creciente competencia de empresas emergentes respaldadas por celebridades, que atrajeron a muchos de sus consumidores más jóvenes a través de su mercadeo en las redes sociales.

Como Kylie Cosmetics, de Kylie Jenner y Fenty Beauty, de Rihanna.
La pandemia solo exacerbó esos problemas, ya que las ventas de lápices labiales, el producto icónico de Revlon, se redujeron cuando las personas se confinaron en sus hogares.
Las ventas netas mundiales cayeron un 20%, de $2 mil 400 millones en 2019 a $1 mil 900 millones un año después. En marzo de 2020, Revlon recortó mil puestos para mejorar la rentabilidad.
En noviembre del mismo año, la empresa evitó declararse en quiebra después de recibir suficiente apoyo de los tenedores de bonos.
“Problemas macroeconómicos” impiden satisfacer la demanda
Debra Perelman, directora ejecutiva de Revlon e hija de Ronald Perelman, dijo que la "estructura de capital desafiante" de la compañía ha limitado su capacidad para satisfacer la demanda de los consumidores mientras navega por "problemas macroeconómicos".

“Al abordar estas complejas restricciones de deuda heredadas, esperamos poder simplificar nuestra estructura de capital y reducir significativamente nuestra deuda, lo que nos permitirá desbloquear todo el potencial de nuestras marcas reconocidas a nivel mundial”, dijo Perelman.
En su informe de ganancias más reciente, Las ventas netas mundiales cayeron un 20%.
Revlon dijo que no puede mantener un suministro regular de materias primas, lo que pone en riesgo la producción, según el expediente judicial. Casi un tercio de la demanda de los clientes no se puede satisfacer a tiempo debido a la falta de materias primas, agregó la empresa.
¿Qué dicen los expertos?
Los expertos dijeron que Revlon podría aprovechar las disposiciones del Capítulo 11 para reorganizar su cartera de marcas, donde algunas más antiguas mostraron un rendimiento insatisfactorio y perdieron clientes.
“Si se ejecuta de manera efectiva, Revlon podría salir de la bancarrota con un balance más limpio y un mejor perfil operativo, mejorando las perspectivas comerciales a largo plazo”, dijo David Silverman, director senior minorista de Fitch Ratings, a RetailDive en comentarios por correo electrónico.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post.