Mientras la comisión del 6 de enero sigue presentando sus conclusiones, Liz Cheney arremete contra Trump.
La representante Liz Cheney (R-WY) enumeró el miércoles por la noche una lista de lo que considera las mayores amenazas que enfrenta el país, que van desde la regulación gubernamental hasta la inflación. Pero aclaró que una amenaza se cierne sobre todas las demás es el expresidente Donald Trump.
"En este momento nos enfrentamos a una amenaza interna a la que nunca nos habíamos enfrentado antes, y es un expresidente que está intentando deshacer los cimientos de nuestra república constitucional", expresó Cheney desde la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan en Simi Valley, California.
Cheney, quien critica abiertamente a Trump, reprendió a los miembros del GOP que, según ella, se han convertido en "rehenes voluntarios de este hombre peligroso e irracional ". Ahora, dijo, tienen que decidir.
"Los Republicanos no pueden ser leales a Donald Trump y leales a la Constitución al mismo tiempo", aseguró.
La afirmación fue recibida con aplausos.
Las declaraciones de Cheney tienen lugar a la vez que la comisión selecta de la Cámara de Representantes para investigar los eventos del 6 de enero realiza audiencias para referentes al mortal asalto en el Capitolio y cómo Trump y sus aliados trataron de anular las elecciones de 2020. Como vicepresidenta de la comisión, Cheney ha asumido un papel principal en la investigación.
Cheney, que en algún momento fue una estrella emergente del Partido Republicano, ha pagado un gran precio político por sus críticas a Trump. El año pasado fue expulsada de su puesto en el liderazgo de la minoría por desafiar las falsas afirmaciones de Trump de que hubo fraude en las elecciones. Posteriormente, los Republicanos de Wyoming también la repudiaron. Cheney ahora se enfrenta a una dura batalla por mantener su escaño en el Congreso. Su contrincante en las elecciones primarias que cuenta con el apoyo de Trump, y Cheney está tratando de atraer a los votantes Demócratas, informó el Washington Post.
En el acto del miércoles, un ciclo de conferencias titulado "A Time For Choosing" (momento de elegir), organizada por la Fundación e Instituto Presidencial Ronald Reagan, Cheney afirmó que las amenazas a la democracia estadounidense son cada vez mayores y que el país se encuentra "al borde de un abismo".
"A medida que todo está saliendo a la luz con la comisión del 6 de enero, ha quedado claro que los esfuerzos que Donald Trump supervisó y en los que se involucró fueron aún más escalofriantes y amenazantes de lo que podríamos haber imaginado", declaró, al destacar un testimonio reciente que afirma que el año pasado Trump quería dirigir la turba armada al Capitolio.
El explosivo testimonio de Cassidy Hutchinson, ex ayudante del entonces jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, tuvo lugar el martes durante una audiencia sorpresa de la comisión. Cheney elogió a Hutchinson, diciendo que "fue impresionante observar su valentía y su patriotismo de ayer". Trump ha negado las afirmaciones de Hutchinson.
Desde el inicio de las audiencias este mes, Cheney ha subrayado que el GOP se enfrenta a una encrucijada; les dice a sus compañeros Republicanos que algunos en su partido están "defendiendo lo indefendible" y que "llegará un día en que Donald Trump se habrá ido, pero su deshonra permanecerá".
El miércoles repitió ese tema.
"Ningún partido, ningún pueblo, ni ninguna nación pueden defender y perpetuar una república constitucional si aceptan a un líder que ha entrado en guerra con el estado de derecho, con el proceso democrático o con la transición pacífica del poder, con la propia Constitución", sostuvo Cheney.
Washington Post - Laura Vozzella and Gregory S. Schneider
Lea el artículo original aquí.