La Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos aconsejó a los padres y representantes que no utilicen los flotadores de cuello para bebés. Esto después de que un niño murió y otro fue hospitalizado tras ahogarse.
Los flotadores de cuello para bebés son unos anillos inflables que se colocan entre la cabeza y el pecho permitiendo que los niños se desplacen libremente en el agua.
La FDA advirtió en el comunicado que el uso de este objeto puede provocar “la muerte o lesiones graves”.
La institución dijo que algunos fabricantes afirman que estos productos se usan para las terapias de agua en bebés con condiciones especiales y que aportan beneficios como mayor capacidad pulmonar, mejor calidad del sueño, estimulación del cerebro y del sistema nervioso.
Sin embargo, no se ha establecido la seguridad y eficacia de los flotadores de cuello para bebés.
No hay evidencia de que aumentan la fuerza, promuevan el desarrollo motor o sirvan como herramienta de fisioterapia.
Según la FDA, el flotador es peligroso en las terapias de agua para niños con espina bífida, atrofia muscular espinal tipo 1 o parálisis cerebral porque puede causar tensión y lesiones en el cuello.
En ambos casos documentados por la institución, en el que un niño murió y el otro está hospitalizado, los cuidadores no estaban monitoreando a los infantes después de colocarles los flotadores en el cuello.
Por ello la FDA advierte a los padres y cuidadores sobre el producto y los instan a informar sobre lesiones o eventos adversos asociados con flotadores de cuello para bebés.
En caso de tener alguna eventualidad con los flotadores deben notificarla al programa de informes MedWatch, junto con detalles y descripciones de los productos.
Fuente principal de la noticia: Tampa Hoy.