Un grupo de diez turistas sobrevivieron a una avalancha de nieve en las montañas de Tian Shan, Kirguistán.
El impactante momento fue grabado y publicado en la cuenta en Instagram del excursionista británico Harry Shimmin.
“Llevaba ya unos minutos allí, así que sabía que había un lugar para refugiarse justo a mi lado”, puntualizó.
En las imágenes se observa cuando en cuestión de segundos una avalancha llegó hasta donde se encontraba, sepultándolo en casi su totalidad.
Shimmin, explicó que logró salir de la nieve por sus propios medios y que al igual que sus compañeros lograron sobrevivir al suceso.
“Todo el grupo reía y lloraba, feliz de estar vivo. Solo después nos dimos cuenta de la suerte que habíamos tenido. Si hubiéramos caminado 5 minutos más, estaríamos todos muertos”, atestiguó.
A su vez, destacó que solo dos personas sufrieron heridas. Una de ellas, una mujer del grupo, se cortó la rodilla, y una segunda persona sufrió lesiones tras caer de su caballo.
Asimismo, detalló que las dos personas fueron llevados al hospital. Por su parte, informó que la avalancha se desvió directamente por el atajo que ellos estaban siguiendo.
“Acabábamos de llegar al punto más alto de la caminata y me separé del grupo para tomar fotos en la cima de un acantilado. Mientras tomaba las fotos, oí el sonido del hielo que se rompía detrás de mí”, certificó.
Según la información ofrecida por el medio The Guardian, en el grupo de diez personas habías nueve personas británicas y una estadounidense.
Las montañas de Tian Shan se amplifican a ambos lados del sudeste de Kirguistán, en su frontera nororiental con China.
Grabado: Turistas sobrevivieron a una avalancha
El turista logró filmar todo el recorrido de la avalancha y reconoció que debió por seguridad refugiarse de inmediato a pesar de sentir que tenía “el control” de la situación.
“Me estaba muriendo de miedo y pensé que podía morir”, asentó.
Tras haber quedado cubierto de la nieve, reflexionó y aseguró que todos se dieron cuenta de que había tenido suerte.
“Solo después nos dimos cuenta de la suerte que habíamos tenido. Detrás de la roca, era como estar dentro de una ventisca”.
Fuente principal de la noticia: La Nación
