Cinco años después de que unas artesanas mayas diseñaran una blusa bordada, la tienda china Shein sacó un diseño parecido que ocasionó que el gobierno mexicano haya pedido explicaciones a la marca por apropiación cultural indebida.
La semana pasada la secretaria de Cultura de México, Alejandra Frausto, le envió una carta a la empresa asiática en la que critica la “apropiación cultural indebida” de una blusa diseñada por Yucachulas, una marca de ropa hecha a mano en el Golfo de México.
La blusa que Shein lanzó al mercado copia el corte de la diseñada por las artesanas mexicanas, también la forma, el color y la posición de las flores amarillas, rojas y fucsias que en vez de estar bordadas, como en el diseño original, fueron estampadas.
En la carta la Secretaría de Cultura expresó que es “una pieza idéntica salvo por las orillas del cuello, mangas y el remate de los arcos finales”.
Explican que los diseños de hiupil, blusas y vestidos hechos a mano, fueron diseñados por mayas y se han transmitido de generación en generación. “Estas flores no solo representan parte del entorno y la naturaleza, sino que forman parte de su cosmovisión está plenamente documentado”, dice el texto.
De estos diseños viven comunidades mayas de los estados sureños de Yucatán, Campeche y Quintana Roo. Yucachulas en nombre de las artesanas emitió un comunicado en el que expresan su descontento hacia Shein y califican la acción como un plagio.

“Nos sorprende la precisión con la que plagiaron el diseño ya que al observar y comparar los detalles de las flores, hojas y colores son idénticos. El “cambio” que hicieron fue poner un color distinto a los bordes de los arcos, del resto es un modelo idéntico”, expresaron.
La marca criticó el precio en el que la blusa era vendida en la plataforma, 144 pesos mexicanos, casi siete dólares. “La calidad no es la misma, en eso estamos de acuerdo, pero el costo al cual las dan no es ni la cuarta parte de lo que cuesta realizarlo de manera artesanal”, se lee en la página de Yucachulas.
Además, la Secretaría Cultural pidió a Shein explicar “con qué fundamentos privatiza una propiedad colectiva” y “cómo su utilización retribuye beneficios a las comunidades creadoras”.
No es la primera vez que las autoridades mexicanas se pronuncian al respecto e intenta proteger la propiedad intelectual de los pueblos originarios, casos parecidos han ocurrido con Nike, Rapsodia, Louis Vuitton, Zara, Mango, Levi’s o Carolina Herrera.
En respuesta la tienda asiática de moda rápida retiró la prenda de su catálogo online.
Un vocero de Shein declaró a El País que la empresa “respeta a los diseñadores, los artesanos y la propiedad intelectual”. Afirmó que no es su intención “infringir la propiedad intelectual válida de nadie y no es nuestro modelo de negocio hacerlo”.
Agregó que los proveedores de Shein “están obligados a certificar que sus productos no infringen la propiedad intelectual de terceros”.
Fuente principal de la noticia: El País.