Los tiempos cambian y la realidad se impone. El futuro de los niños hay que empezarlo a construir desde edades tempranas. Dejar la búsqueda de un college y una universidad para cuando sus hijos han llegado a los últimos años de secundaria es demasiado tarde.
Para ayudarlos en este recorrido está el Latino Education Advancement Fund (LEAF), una organización sin fines de lucro, que guía a los estudiantes y padres de familia en el proceso de cómo elegir la profesión, el college y las opciones de becas. Lo interesante es que todo es en español, sea en California, Puerto Rico, Maryland o el área metropolitana de DC.
“Entrenamos a la primera generación de padres y estudiantes latinos para crear una atmósfera de armonía en casa, porque así es como se consigue facilitar el progreso académico de los hijos”, dice Dinorah Olmos, presidenta fundadora del LEAF. ¿Cuál es el método?, talleres presenciales y online, conferencias y la cumbre anual, que se realiza el 22 y 23 de octubre.

Para asistir a los talleres no tiene que salir de casa, ni perder un día de trabajo y menos preguntar cuánto cuesta. Todas las actividades serán el fin de semana, por zoom y son gratuitas. Solo regístrese en esta dirección: https://bit.ly/6aCumbre.
Talleres para niños especiales
El 22, los talleres son para los estudiantes y el 23 para los padres. Se realizarán unos 15 cursos simultáneos por día. Los más pequeños tendrán tutorías en escritura y lectura, para los más grandecitos habrá proyectos científicos y clases de matemáticas.
A los padres se les enseñará cómo identificar síntomas de depresión en sus niños, cómo manejar las emociones y frustraciones de los chicos, cómo lograr que desde muy pequeños se interesen en la lectura y cómo empezar a buscar el college o la universidad y el financiamiento.

“Tendremos más de 30 expertos, entre ellos científicos, doctores, psicólogos y expertos en educación superior”, dijo Olmos, quien destacó que a pedido de muchos progenitores esta vez habrá talleres para padres con niños que necesitan educación especial. “Entre los latinos hay desconocimiento sobre los derechos de los niños especiales y de los doblemente excepcionales, son muy inteligentes en matemáticas, música u otras destrezas y los padres no saben cómo enfrentar esa situación y que hay oportunidades después del colegio.
Las universidades -no todas aún- están cambiando las reglas de juego. Ahora, además, de excelentes alumnos quieren saber qué han hecho por su comunidad, cuáles son las organizaciones voluntarias en las que han aportado y en qué tipo de liderazgo son buenos.
Esto es más complejo, porque todo depende del nivel de educación de los padres, de dónde viven, de los recursos económicos, de la escuela a la que asisten. “En temas como estos los guiaremos en la cumbre”, afirmó Olmos, quien tiene más de 35 años de experiencia en educación.

La tranquilidad de dos madres de familia
Isabel Aguilar, sin dinero y sin información, no sabía por dónde empezar para lograr que su primer hijo vaya a la universidad. “Fue una bendición enterarme de este Fondo y que todo es en español. Eso nos abrió la mente a las posibilidades”. Como tiene tres hijos, Aguilera lleva seis años asistiendo a las charlas y talleres presenciales y online.
Adolfo, su hijo, no nació en Estados Unidos y, aparentemente, por esa razón no iba a tener ninguna oportunidad. LEAF lo ayudó a inscribirse en un curso de política y religión en Princeton University. Cuando volvió a Maryland dijo: “mamá tengo buenas calificaciones, quiero ir a la universidad”. Está en su tercer año de ciencias forenses en la Universidad de Loyola.
Su segunda hija, durante la pandemia sufrió de depresión y los psicólogos de LEAF la ayudaron a salir y a sus 11 años ya la están preparando para la universidad. “Viniendo de Honduras, el futuro que les esperaba a mis niños era cortar césped o trabajar en un salón de belleza, ese círculo lo van romper y no puedo estar más que agradecida”, aseguró Aguilar.

Los tutores de matemáticas, lenguaje, ciencias o ensayos son de las universidades de Nueva York, Texas o California. Varios de ellos son estudiantes que en algún momento se beneficiaron de los talleres y tutorías del LEAF.
Los dos hijos de Yury Mena-Iglesias son otros beneficiarios de los programas de LEAF. Su hija mayor, Yury Guardado, fue la única becada con honores de Maryland para asistir a un campamento de matemáticas en la Universidad de Texas. La niña estudia en una escuela privada con beca; y, Rodrigo, el menor, recibe tutorías en lectura y matemáticas.
“Como mamá latina me siento muy apoyada por la organización de Olmos. Ella, en persona, nos explica sobre el sistema de educación. Llegamos a Estados Unidos hace seis años, desde entonces el futuro de mis hijos lo tengo arrimado al hombro de LEAF”, dijo Mena-Iglesias.