El Real Madrid y Partizán fueron los protagonistas de uno de los momentos más lamentables en el baloncesto en los últimos años. Sobre el final del segundo partido de la serie de playoffs en la Euroliga, ambos equipos se cruzaron en una brutal batalla campal.
La chispa que encendió la mecha de la pelea surgió cuando el base del Madrid Sergio Llull realizó una falta antideportiva sobre el estadounidense del Partizán Kevin Punter. Por lo que rápidamente llegaron varios jugadores de ambos equipos para iniciar la tangana.
Pero el mayor protagonista de este hecho bochornoso fue el ala-pívot del conjunto blanco Guerschon Yabusele, cuando totalmente descontrolado decidió acercarse al alero del equipo de Belgrado Dante Exum para hacerle una llave al más puro estilo de la UFC.
Tras el violento episodio, en donde en varios videos se puede apreciar como los jugadores se insultaban, lanzaban golpes y demás, el encuentro se suspendió. Por lo que el Partizán se hizo con la victoria, aunque cuando ocurrió el grave incidente iba ganando por 95-80.
Sanciones
Ese mismo día, la Euroliga condenó "enérgicamente" los hechos ocurridos al final del partido entre el Real Madrid y el Partizán. Por lo tanto, este viernes anunció la decisión del Juez Único del campeonato sobre las sanciones a los involucrados en el altercado.
Según estableció la Euroliga en un comunicado, la mayor sanción fue para Yabusele, quien fue suspendido por cinco partidos. Los otros suspendidos son el también madridista Gaby Deck (un partido) y los del Partizan Kevin Punter (dos) y Mathias Lessort (uno).
Además, tanto el Madrid como el Partizán fueron castigados con una multa de 50 mil euros por su "comportamiento antideportivo". Estas sanciones no están sujetas a apelación al haberse producido durante un partido de eliminatoria, según indica la agencia EFE.
Después del enfrentamiento, Sergio Llull y Guerschon Yabusele acudieron a sus redes sociales para reconocer su responsabilidad en hecho acontecido. El español precisó que los actos de violencia "no deben ocurrir" en una cancha, mientras que el francés se arrepiente "profundamente de su comportamiento".
En la batalla campal los árbitros acabaron descalificando a 21 jugadores, lo que les obligó a suspender el partido. Ahora el Partizán lidera la eliminatoria por un global de 2-0 y el siguiente encuentro entre ambos equipos en esta serie será en Belgrado el 2 de mayo.
