Activistas contra el cambio climático, usaron una mezcla de concreto para pegar sus manos al asfalto y bloquear el tráfico en dos aeropuertos de Alemania. Pero la acción se volvió en su contra y se viralizaron en redes sociales.
Trascendió que la mezcla usada se solidificó durante la protesta y los manifestantes podrían requerir amputaciones en sus manos.
Los activistas protestaron en las pistas de despegue de los aeropuertos de Hamburgo y Düsseldorf el jueves, día en que varias ciudades empiezan las vacaciones de verano, reseñó DW.
Estas protestas extremas han causado no sólo daños físicos a los manifestantes, sino también molestias e inconvenientes a miles de viajeros. Quienes han visto sus vuelos cancelados o retrasados.
Una práctica que les puede costar una extremidad
De acuerdo al Programa de Capacitación para la Seguridad con el Cemento de Texas el cemento fresco tiene un pH alto debido a la adición de óxido de calcio. Cuando se mezcla con agua, se convierte en hidróxido de calcio con un pH de entre 12 y 14 (un alcalino alto).
Al lavarse inmediatamente el cemento fresco, causa poca irritación. Sin embargo, si se deja en la piel por períodos prolongados los compuestos alcalinos del cemento penetran en la piel y causan quemaduras químicas graves.
Cuando el concreto fresco o el mortero quedan atrapados en la piel, el resultado puede ser quemaduras de primer, segundo o tercer grado. Pueden aparecer ampollas, piel muerta o endurecida; o piel negra o verde, según indica el protocolo de seguridad.
“En casos severos, las quemaduras químicas del cemento pueden extenderse al hueso y causar cicatrices que pueden desfigurar o causar discapacidades. Estas lesiones pueden tardar varios meses en sanar y pueden implicar hospitalizaciones, injertos de piel o amputaciones”, se lee en una publicación.
Hechos similares
En los últimos meses, se ha vuelto más popular entre los alarmistas climáticos alemanes la práctica de fijarse al pavimento. Lo cual a menudo requiere que los oficiales usen simulacros y cinceles para liberar a los jóvenes.
El pasado 13 de diciembre se desarrolló la movilización contra los combustibles fósiles en la ciudad de Maguncia, Alemania. Y allí estaba Raul Semmler, un exactor de telenovelas de 38 años, quien usó una combinación de arena y pegamento para adherirse a la calle.
Según medios internacionales la combinación demostró ser tan efectiva que la policía no pudo liberar su mano con un solvente normal. Y en su lugar tuvo que usar un martillo neumático para cortar, dejándolo con un trozo de asfalto pegado a la mano.
Los hispanos sufren más el impacto del cambio climático
