El destino de Keith Gibson, un hombre de 41 años nacido en Filadelfia y sospechoso de una secuencia de homicidios, depende ahora de la decisión de un jurado de Delaware. El jurado comenzó sus deliberaciones este lunes tras los alegatos finales de un juicio que ha tenido en vilo tanto a Delaware como a Pensilvania desde 2021.
Gibson está acusado del asesinato de Leslie Ruiz-Basilio, una empleada de una tienda de telefonía móvil de Elsmere de 28 años. También por el aseinato de Ronald Wright, un traficante de drogas de Wilmington de 42 años. Cada asesinato se produjo en medio de incidentes separados de robo. Además, Gibson también enfrenta cargos por disparar al empleado de una tienda de Wilmington, Belal Almansoori, y por otro robo a mano armada.
A Gibson le esperan cargos adicionales en Filadelfia, sancionados por el fiscal del distrito Larry Krasner. Estos cargos se refieren a los presuntos homicidios de la madre de Gibson, del gerente de una tienda de donuts de Filadelfia y de dos hombres descubiertos con disparos mortales en la cabeza en una tienda de Filadelfia. Estos cargos avanzarán tras la finalización del juicio de Gibson en Delaware.
Los fiscales de Delaware se han basado ampliamente en grabaciones de videovigilancia y pruebas de balística en su caso contra Gibson. Sostienen que estas pruebas revelan una escalofriante narración de los robos y tiroteos de Ruiz-Basilio y Almansoori. La acusación también sostiene que las pruebas de balística vinculan los tiroteos de Ruiz-Basilio y Wright con un revólver descubierto durante la detención de Gibson.
El caso de Keith Gibson en Delaware
El caso de la fiscalía dibuja un escenario espeluznante. Las imágenes de vigilancia de una tienda Metro PCS de Elsmere captan a un hombre armado que intimida a Ruiz-Basilio. Luego la conduce a la parte trasera de la tienda y le dispara mortalmente antes de huir con dinero y teléfonos móviles robados. Almansoori, otra víctima, aparece en la cámara fingiendo la muerte para esquivar el disparo inicial del pistolero, sólo para recibir dos disparos más. Almansoori sobrevivió y testificó en el juicio de Gibson.
Por el contrario, los abogados defensores de Gibson no han presentado pruebas ni testigos. En su lugar, han centrado su estrategia en rebatir los argumentos de la acusación interrogando a los testigos y destacando la falta de pruebas de ADN o huellas dactilares que vinculen a Gibson con los delitos.
Se cree que Gibson, autodenominado "la Bestia", inició su racha violenta poco después de salir de una prisión de Delaware en diciembre de 2020. Había cumplido una condena de 13 años por homicidio y posesión de armas de fuego durante la comisión de un delito grave. Tras el atraco a la tienda de teléfonos móviles, las autoridades detuvieron a un hombre en posesión de uno de los teléfonos robados, lo que asocia aún más a Gibson con el crimen.
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