El ministro del Interior de Ucrania, Ihor Klymenko, declaró este jueves que un ataque con misiles de racimo de Rusia en la ciudad de Kherson, dejó como saldo seis civiles muertos.
Según las autoridades ucranianas, Rusia usó municiones en racimo para este ataque, lo que elevó el número de muertos.
Klymenko informó que el ataque dejó cinco heridos graves, además el bombardeo generó daños en más de 60 edificios residenciales y de infraestructuras.
La importancia de la región de Kherson
Situada estratégicamente a lo largo del río Dniéper, cerca de la desembocadura del Mar Negro, Jerson sirve de puerta de entrada esencial a Crimea. Tras la anexión de Crimea a Ucrania en 2014, Rusia la utiliza ahora con fines logísticos y de suministro en el conflicto actual.
La región de Kherson, dada su importancia militar y su ubicación en primera línea, se convirtió en un foco de combates. Las fuerzas ucranianas anunciaron recientemente la captura con éxito de varias cabezas de puente en el lado oriental del río, dominado por Rusia.
Antes del ataque de este 23 de noviembre, las fuerzas rusas ejecutaron ocho ataques nocturnos con artillería en distintas zonas de la provincia.
Estos ataques se saldaron con la muerte de un hombre en su edificio y otra persona herida, según informó la oficina presidencial ucraniana. Los ataques rusos también se cobraron otras dos vidas en la región de Donetsk, en el este de Ucrania.
Qué son las municiones de racimo
Las municiones de racimo, conocidas por su amplio impacto, estallan en el aire, liberando numerosos explosivos más pequeños que cubren una amplia zona.
Estas armas, que han generado críticas por causar un número excesivo de víctimas civiles, son utilizadas actualmente tanto por Rusia como por Ucrania, país que las recibe como ayuda militar de Estados Unidos.
La estrategia rusa de bombardeos de largo alcance dirigidos contra la población civil se ha convertido en una característica distintiva de la guerra de casi dos años de Moscú en Ucrania.
En otro hecho, los medios de comunicación estatales rusos lamentaron la muerte del periodista de televisión Boris Maksudov, que al parecer murió por las heridas provocadas por el ataque de un dron mientras informaba en la región de Zaporizhzhia, controlada por Rusia, en el sur de Ucrania.
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