ir al contenido

Pensilvania y Filadelfia lideran la escalada de precios de los comestibles en EE.UU.

El aumento de los precios de los comestibles en Pensilvania y Filadelfia establece un máximo a nivel nacional

Para los compradores habituales de Pensilvania y Filadelfia, el aumento de los precios de los comestibles no es ninguna sorpresa. Un estudio reciente confirma esta observación, indicando que Pensilvania y Filadelfia han sido testigos de la subida más significativa de los precios de los alimentos en todo EE.UU. durante el año pasado.

Consumer Affairs, una reconocida plataforma de investigación y defensa de los consumidores, constata un aumento del 8,2% en los precios en Pensilvania en comparación con el año pasado. Este porcentaje supera el crecimiento medio nacional del 5,3%, lo que sitúa a Pensilvania como el estado con el mayor aumento de EE UU.

La situación es aún más alarmante en Filadelfia, la ciudad con la subida de precios de comestibles más pronunciada entre todas las áreas metropolitanas de EE UU. Esta tendencia se corresponde con la subida general del coste de los productos en toda la región en los últimos años. El Índice de Precios al Consumo muestra que los precios locales se han disparado un asombroso 24% desde 2020.

Por el contrario, Colorado ha mantenido una inflación relativamente baja, de sólo el 2,9%, la más baja del país. Esto significa que, de media, los compradores de Pensilvania gastarán casi 500 dólares más al año en comestibles que los de Colorado.

El título al menor incremento de precios entre las áreas metropolitanas es para Richmond, Virginia, situada a sólo 250 millas al sur de Filadelfia. Se calcula que los residentes de Richmond ahorrarán unos 427 dólares anuales en alimentos en comparación con los de Filadelfia.

¿Qué hace que suban los precios de los comestibles?

Diversos factores contribuyen a estas variaciones regionales. Los especialistas del sector sugieren que estos factores van desde los costes operativos y la logística del transporte hasta los impactos de la cadena de suministro global. También entran en juego las leyes de la oferta y la demanda.

En las áreas metropolitanas del noreste, densamente pobladas y con salarios generalmente más altos, los minoristas pueden permitirse subir los precios. Sin embargo, la dinámica competitiva del mercado sirve a menudo para contrarrestar esta inflación de precios.

Debido a esta intrincada interacción de factores, los precios de los comestibles en Filadelfia se han disparado, duplicando a menudo la tasa de otras ciudades.

Aunque Filadelfia lidera actualmente la tabla, las zonas rurales suelen encontrar precios más altos debido a los elevados costes de transporte y al menor poder adquisitivo, lo que se traduce en tiendas de alimentos más caras.

Te puede interesar leer:

La inflación se enfrió en noviembre. ¿Qué debes saber?

Últimas Noticias