Una reunión del consejo en Keretsky, al oeste de Ucrania, se convirtió en un escenario devastador cuando el concejal local Serhii Batryn decidió detonar unas granadas de mano en la sala donde se encontraba junto a sus colegas este viernes por la mañana.
El violento estallido se saldó con 26 heridos graves, dejando casi destruida la sala donde se encontraban los concejales.
Batryn, identificado por los medios de comunicación ucranianos como el autor del ataque con granadas en la reunión. Fue grabado el viernes por la mañana sacando granadas de su chaqueta y lanzándolas al suelo de la reunión.
Lejos de ser una protesta, este acto provocó múltiples explosiones, llenando la sala de humo y dejando cuerpos heridos esparcidos por los alrededores.
¿Por qué reaccionó así?
El desencadenante parece haber sido una polémica disputa entre Batryn y otros miembros del consejo sobre una propuesta de aumento salarial para el líder del consejo.
Según el diario Kyiv Independent, el autor del ataque se enfrascó en una acalorada discusión durante la reunión, se marchó y luego regresó con las granadas.
Las fuerzas del orden ucranianas han confirmado que seis de los heridos se encuentran actualmente en el hospital, con lesiones que ponen en peligro su vida.
Los informes iniciales sugerían que Batryn había muerto en el ataque con granadas. Sin embargo, los profesionales médicos consiguieron reanimarle más tarde.
Una declaración de la policía ofreció más información sobre el incidente: "Como resultado, 26 personas resultaron heridas, seis de las cuales se encuentran en estado grave".
La investigación sobre este acto de violencia inesperada en el pueblo ucraniano sigue su curso, marcando un día sombrío en la historia de Keretsky.
El conflicto Ucrania-Rusia ha tenido un impacto significativo en la población civil y en la infraestructura de Ucrania. Miles de personas han muerto y millones han sido desplazadas como resultado de la violencia y los combates.
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