El máximo líder de Hamás, Ismail Haniyeh, viajó este miércoles a El Cairo, Egipto, para negociar otro alto el fuego y un intercambio de rehenes.
El viaje, instigado por la implacable ofensiva israelí y el llamamiento a un nuevo alto el fuego y al intercambio de prisioneros, subraya la creciente gravedad de la guerra.
Hamás, una facción paramilitar, exhibió su rebeldía mediante un ataque con misiles que hizo saltar las alarmas en todo el centro de Israel.
Este acto de desafío puso de relieve un agotador conflicto de 10 semanas que ha asolado el norte de Gaza, cobrándose la vida de casi 20.000 palestinos y obligando a una abrumadora mayoría (aproximadamente el 85%) a evacuar sus residencias.
Como reacción a la embestida de Hamás del 7 de octubre, Israel ha estado recabando apoyo internacional para etiquetar a Hamás como organización terrorista. Esta táctica está diseñada para debilitar la influencia del grupo.
Sin embargo, Egipto y Qatar, actuando como mediadores, han reavivado las conversaciones indirectas para asegurar otro alto el fuego y negociar la liberación de los rehenes adicionales capturados durante el asalto de octubre.
A medida que avanzan las negociaciones, Gaza se enfrenta a cortes de telefonía móvil y de Internet, lo que establece una barricada de comunicación que podría obstaculizar las negociaciones con los líderes de Hamás, que han mantenido un perfil bajo desde la ofensiva de octubre.
Negociación con el líder de Hamás en Egipto
A pesar de los esfuerzos diplomáticos, sigue siendo difícil alcanzar un consenso. Hamás es inflexible en su exigencia de la liberación de un número significativo de prisioneros palestinos, incluidos militantes de alto rango, a cambio de los rehenes restantes, una proposición que Israel ha rechazado hasta ahora.
En el pasado reciente, Egipto y Qatar facilitaron un alto el fuego de una semana de duración, que llevó a Hamás a liberar a más de 100 rehenes a cambio de que Israel liberara a 240 prisioneros palestinos.
Sin embargo, el recuento actual de cautivos en manos de Hamás y otras facciones militantes se estima en 129.
Se espera que Haniyeh, que se cree que reside en Qatar, participe en las conversaciones con funcionarios egipcios sobre la contienda en curso. Egipto, que comparte frontera con Gaza, recela de una posible afluencia de refugiados palestinos y de la posibilidad de que Israel no permita su regreso.
Saldos
La embestida israelí contra el norte de Gaza, densamente poblado, incluido el campo de refugiados de Jabaliya, cerca de la ciudad de Gaza, es implacable y provoca un gran número de bajas.
Simultáneamente, se ha iniciado una invasión terrestre en el sur de Gaza, que el ministro de Defensa, Yoav Gallant, predice que durará "meses".
A medida que persiste el conflicto, se intensifican los llamamientos a un alto el fuego. Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU se esfuerzan por aprobar una resolución patrocinada por los árabes para detener los combates y facilitar ayuda humanitaria urgente a Gaza.
Estados Unidos, a pesar de haber vetado una propuesta anterior de alto el fuego, se encuentra bajo presión para abstenerse o votar a favor de la resolución.
A pesar del clamor mundial por la paz, Israel sigue firme en su misión de desmantelar Hamás, recuperar a todos los rehenes y asegurar sus territorios.
Mientras tanto, la administración del presidente estadounidense, Joe Biden, sigue defendiendo medidas adicionales de protección de los civiles, aunque mantiene su apoyo diplomático y militar a la ofensiva israelí.