El este de Australia sufre actualmente cambios meteorológicos extremos que han han dejado al menos dos muertos y cortes generalizados del suministro eléctrico.
La fuertes tormentas, con lluvias torrenciales, granizo y vientos huracanados, han causado grandes daños en las infraestructuras y la vida cotidiana, de acuerdo con reportes el martes 26 de diciembre.
En el sureste del estado de Victoria, el departamento de Policía informó la muerte de un hombre en la zona rural de Gippsland, a unos 144 kilómetros al este de Melbourne a causa de una caída de una rama de árbol durante la tormenta, que además provocó inundaciones y cuantiosos daños materiales en la región.
Del mismo modo, el Servicio de Ambulancias del estado de Queensland informó de la muerte de una mujer de 59 años de edad tras la caída de un árbol en el popular destino turístico de Gold Coast, a unos 79 kilómetros al sur de Brisbane.
Carreteras bloqueadas
La tormenta mortal también provocó la caída de numerosos árboles, dañando casas y bloqueando carreteras. Los fuertes vientos, que alcanzaron velocidades de hasta 100 kilómetros por hora, provocaron unos 300 derrumbes de tendidos eléctricos, reportó la agencia de noticias EFE.
En Nochebuena, unos 124.000 residentes de la Costa Dorada sufrieron cortes de electricidad. Hasta este martes, la mayoría seguía esperando el restablecimiento del suministro eléctrico.
Steven Miles, jefe del gobierno de Queensland, reveló en rueda de prensa: "Nunca habíamos visto una tormenta tan intensa que derribara postes eléctricos de hormigón".
Eventos infantiles suspendidos
Las predicciones meteorológicas sugieren que Gold Coast y sus alrededores seguirán enfrentándose a otro día de fuertes lluvias, posibles inundaciones, granizo y vientos de hasta 90 kilómetros por hora. Como consecuencia, parques de atracciones locales como Movie World y Dream World suspendieron temporalmente sus operaciones.
Además, se prevé que las condiciones meteorológicas inestables continúen durante las próximas 24 a 48 horas en regiones de Nueva Gales del Sur, situadas al sur de Queensland. Esto podría interrumpir la tradicional regata entre Sydney y la capital de Tasmania, Hobart.
Desde el domingo 24 de diciembre, las tormentas han inundado varias calles de Sídney y el aeropuerto de la ciudad. Además, docenas de casas cerca del puerto de Newcastle, Hunter, sufrieron daños por una tormenta de granizo.
Recientemente, las secuelas del ciclón Jasper dejaron aisladas a muchas comunidades remotas de Australia en la región septentrional de Queensland debido a las inundaciones.
A pesar de un verano inusualmente seco debido a El Niño, el este de Australia ha estado luchando con lluvias considerables.
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