Una empresa de alimentos para mascotas retiró del mercado tres de sus productos que habían sido comercializados en la costa este, entre ellos Pensilvania.
Según la FDA, la compañía Blue Ridge Beef retiró voluntariamente del mercado sus alimentos para mascotas llamados Kitten Grind, Kitten Mix y Puppy Mix debido a la contaminación por Salmonella y Listeria.
Los números de lote de los tres productos retirados son N24 1114 a N24 1224. Los números de lote se encuentran en pestañas plateadas al final de los tubos.
Los productos retirados se vendieron principalmente en tiendas minoristas de siete estados cercanos a la costa este: Connecticut, Massachusetts, Maryland, Carolina del Norte, Nueva York, Pensilvania y Virginia.
La retirada se produce después de que el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor de Carolina del Norte notificara a la empresa que se habían tomado muestras de un lote de cada producto y que éstas habían dado positivo en las pruebas de Salmonella y Listeria.
La FDA afirma que la contaminación presenta riesgos para la mascota que consume el alimento y para el humano que lo manipula.
Las mascotas infectadas por Salmonella y Listeria pueden estar letárgicas y tener diarrea o diarrea sanguinolenta, fiebre y vómitos. Algunas mascotas pueden experimentar disminución del apetito, fiebre y dolor abdominal. Si su mascota ha consumido el producto retirado y presenta estos síntomas, póngase en contacto con su veterinario.
Las personas deben vigilar la aparición de síntomas como náuseas, vómitos, diarrea o diarrea sanguinolenta, calambres abdominales y fiebre. Si ha manipulado alguno de estos productos retirados y presenta estos síntomas, póngase en contacto con su proveedor de atención sanitaria.
La FDA afirma que hasta el momento no se ha informado de ninguna enfermedad.
Se insta a quienes hayan comprado estos productos a que se pongan en contacto con Blue Ridge Beef enviando un correo electrónico a blueridgebeefnc@yahoo.com para obtener un reembolso.
Los productos deben destruirse de forma que no puedan acceder a ellos los niños, los animales domésticos o la fauna salvaje. No deben revenderse ni donarse. Todos los recipientes que contenían los productos deben desinfectarse.