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Avatar: the last airbender: El esfuerzo más reciente de Netflix

Avatar: the last airbender
Imagen cortesía de Nickelodeon y Netflix

La reimaginación live action de la aclamada serie animada Avatar: The Last Airbender, ha recibido críticas tibias. Los críticos sugieren que la serie es una pálida imitación de la original, que capitaliza la nostalgia en lugar de elaborar un argumento propio y cautivador.

La historia inicial de la serie ha suscitado el debate. James Greig, en un reciente artículo de Dazed, propuso que la cultura pop atiende cada vez más al anhelo del público de revisitar su juventud. Esta tendencia, según Greig, queda ejemplificada por la cultura del remake que impera actualmente en la esfera del entretenimiento. La versión de Netflix de Avatar: The Last Airbender, creada inicialmente por Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko para Nickelodeon, es un ejemplo perfecto.

El problema del live action

La raíz del problema, al parecer, reside en la delicada tarea de transformar personajes animados en personajes reales. La animación ofrece una fluidez en la expresión visual que no siempre se traslada bien al live action. Esta discrepancia es especialmente evidente en la nueva serie Avatar, donde el dinamismo visual parece haberse perdido en el paso a la acción real.

La nueva serie parece un proyecto impulsado por la nostalgia, que sustituye la animada estética del original por un aspecto más sombrío. A pesar de los impresionantes efectos especiales, la serie carece de la atractiva narración visual del original. Los mas críticos argumentan que la serie parece desconectada y sin inspiración, luciendo un aspecto genérico de Netflix que no hace honor a la identidad visual única del original.

Imágenes extraídas por Nickelodeon y Netflix

La adaptación al anime de Netflix, Cowboy Bebop, estrenada en 2021, se enfrentó a críticas similares. Los críticos consideraron que carecía de las influencias únicas del original y que se apoyaba demasiado en la imaginería original para apuntalar la serie.

La recientemente estrenada Avatar: The Last Airbender ha sido objeto de críticas por no comprometerse profundamente con el contenido original. Descrita como de tono más oscuro, los críticos argumentan que evita explorar las complejidades morales vistas en la serie original, socavando así su pretensión de madurez.

Imágenes extraídas por Nickelodeon y Netflix

¿Es una mala idea?

Teniendo un balance entre momentos memorables, complejidades éticas y morales y un humor fácil pero inteligente, a serie original sigue teniendo un atractivo masivo y es fácilmente accesible en Netflix, sin embargo, si bien esta nueva adaptación no es rotundamente mala como la película en el mismo formato live action del año 2010, si parece carecer de muchos de estos aspectos que hacen de la original una serie recordada.

En conclusión, aunque los remakes no son inherentemente defectuosos, exigen una visión y un propósito claros. Al limitarse a replicar el pasado sin añadir nada nuevo, el remake no consigue justificar su existencia. Tal y como están las cosas, la nueva serie Avatar: The Last Airbender parece ser un excelente ejemplo de esta nostalgia fuera de lugar, fracasando a la hora de mantenerse como una entidad independiente y negándose a evolucionar a partir de su predecesora animada.