El expresidente Donald Trump y su equipo de abogados acudirán a Florida este jueves para desestimar el caso de los documentos clasificados.
Lo que debemos saber: los abogados de Trump pretenden desestimar los cargos penales federales en su contra, vinculados al manejo de documentos clasificados.
Su principal defensa se apoya en la Ley de Registros Presidenciales de 1978, alegando que protege a Trump de repercusiones legales relativas a la retención de material presidencial.
Trump viajará a Florida para desestimar el caso de documentos clasificados
Esta audiencia analizará ambas partes -la defensa de Trump y la acusación, encabezada por el abogado especial Jack Smith- debatir sobre la interpretación de la ley de 1978.
Un aspecto central del debate es si Trump tenía autoridad para considerar ciertos documentos como registros personales, eximiéndolos así de los requisitos de la ley.
Smith no está de acuerdo, afirmando que los registros presidenciales no pueden clasificarse arbitrariamente como personales por solo sacarlos de la Casa Blanca.
Insta a la jueza Aileen Cannon a que rechace la petición de inmunidad de Trump basándose en esta premisa.
Los argumentos para desestimar el caso
Los abogados de Trump avanzan con un argumento secundario, sugiriendo que el estatuto utilizado contra Trump es demasiado vago cuando se aplica a los presidentes, lo que lo hace, según ellos, “inconstitucional”.
Trump, afirmando su inocencia, ya se ha declarado no culpable de cargos que incluyen la retención intencionada de información de defensa nacional y conspiración para obstruir la justicia.
Con el juez Cannon al frente, el calendario del juicio sigue siendo incierto, ya que se retrasó de su fecha original del 20 de mayo para dar más tiempo a la defensa para prepararse.
La acusación también implica a Walt Nauta y Carlos De Oliveira, acusados de tratar de obstaculizar a la justicia al intentar supuestamente borrar las grabaciones de seguridad de la residencia Mar-a-Lago de Trump.