Una importante demanda apunta al Departamento Correccional de Oklahoma (ODOC), junto con su cúpula directiva y varios miembros del personal, acusándoles de graves violaciones de los derechos humanos, reseña OKC Fox.
El caso, presentado ante el tribunal de distrito del condado de Oklahoma, se centra en la práctica de recluir a los reclusos en diminutas cabinas de ducha, que los representantes legales han condenado como "castigo cruel e inusual".
Richard Labarthe, coabogado de los demandantes, junto con Alexey Tarasov, compartió las condiciones descubiertas. "Los reclusos fueron confinados durante días y noches continuas, una clara muestra de inhumanidad", remarcó Labarthe, haciendo hincapié en la gravedad del caso. El demandante principal, Daniel Saldivar, solicitó originalmente un traslado de celda por motivos de seguridad, sólo para ser colocado en una cabina de ducha de 3 por 3 pies durante periodos prolongados, lo que le empujó a un intento de suicidio.
El litigio ha ganado tracción con otros seis reclusos que se han unido a Saldivar, todos compartiendo relatos de similar angustia física y emocional. Labarthe abordó la falta de provisiones básicas durante el confinamiento, declarando: "Algunos soportaron hasta cinco días sin ningún medio para hacer sus necesidades, ni siquiera se les proporcionó un cubo básico".
Los señalamientos culminaron en una investigación del Inspector General del departamento el pasado agosto. Según los documentos publicados a través de una solicitud de registros abiertos, algunos reclusos estuvieron confinados en estas celdas improvisadas hasta nueve días debido al hacinamiento y a los rechazos selectivos de alojamiento.
La situación se agravó cuando se reveló que algunos funcionarios de prisiones fueron sancionados por ofrecer a los reclusos artículos de primera necesidad, como mantas y agua. En respuesta a estos acontecimientos, el director ejecutivo del ODOC, Steve Harpe, implicado en la demanda, reconoció los ajustes de procedimiento pero negó cualquier violación de los derechos humanos. "Hemos revisado las definiciones de violación de los derechos humanos con nuestro asesor general y hemos garantizado su cumplimiento", declaró Harpe.
La demanda se basa en las conclusiones del inspector general para argumentar que esas condiciones deplorables no se limitaban a las instalaciones de Hinton, sino que prevalecían en múltiples ubicaciones del ODOC.