Tesla, bajo la dirección de Elon Musk, hizo anuncio en relación con su red de Supercargadores. La empresa despidió a todo su equipo responsable del despliegue de los Supercargadores Tesla.
Este movimiento afecta a cerca de 500 empleados y supone un importante reajuste en la estrategia de infraestructura de carga de Tesla.
El martes , como parte de unos despidos más amplios que afectaron a más de 3.300 trabajadores en toda California, Musk anunció el cierre de la unidad específica encargada de las instalaciones de Supercargadores.
Nueva estación de supercargadores y nueva estrategia de Elon Musk en Tesla
Este cambio coincide con la nueva política de Tesla de abrir sus estaciones de Supercargadores a los vehículos eléctricos (VE) que no sean de Tesla, aumentando así la utilidad de su red de carga rápida.
California, un mercado crítico para Tesla, alberga aproximadamente 10.000 unidades Supercharger.
Según el gobernador Gavin Newsom, el estado cuenta ahora con una estación de carga rápida por cada cinco gasolineras, lo que subraya el papel fundamental de los Supercargadores de Tesla en el apoyo al creciente sector de los VE en California.
Esta red es esencial a medida que el estado avanza hacia la sustitución de los motores de combustión tradicionales por alternativas eléctricas respetuosas con el medio ambiente.
Tesla no producirá más estaciones de carga tras tomar prioridad en su infraestructura
Tras los recientes despidos, Tesla tiene la intención de desacelerar la expansión de nuevas estaciones de carga y centrarse más en el mantenimiento de su infraestructura existente.
Este ajuste estratégico produjo interrogantes sobre la futura expansión de la infraestructura de VE y la evolución del papel de Tesla dentro de ella, especialmente a medida que aumenta la demanda de VE.
El equipo de Supercharger, ahora disuelto, desempeñó un papel clave en el desarrollo de una red fundamental tanto para el éxito de Tesla como para sus objetivos medioambientales al fomentar una adopción más amplia del VE.
La reducción de plantilla y el cambio estratégico podrían afectar a las decisiones de los clientes potenciales, dado que la disponibilidad y la comodidad de las instalaciones de recarga son fundamentales en la transición a los vehículos eléctricos.
