Donald Trump advirtió que, en caso de que lo elijan como presidente, usaría a la Guardia Nacional para deportar a millones de inmigrantes en todo el país.
Su propuesta, destinada a renovar sus conocidas y estrictas políticas de inmigración, fue revelada en una entrevista con la revista TIME. La visión de Trump se alinea estrechamente con su anterior retórica de campaña, que desempeñó un papel crucial durante su ascenso hasta la Casa Blanca.
En la entrevista, Trump no especificó las funciones precisas que podría desempeñar la Guardia Nacional en estos esfuerzos de deportación. Sin embargo, indicó su disposición a desplegar militares en servicio activo si la situación se agrava.
"Si las cosas parecieran entrar en una espiral, utilizar a los militares no estaría fuera de la mesa", declaró el líder republicano. "Nuestro país necesita permanecer seguro. Necesitamos mantener la ley y el orden, y creo que la Guardia Nacional es muy adecuada para esta tarea", dijo.
La propuesta de Donald Trump no es original pero tienen novedades
Utilizar a la Guardia Nacional y a las tropas en servicio activo para ayudar a los funcionarios de inmigración en las fronteras estadounidenses no es algo nuevo.
Históricamente, estas fuerzas apoyaron funciones como la logística, la vigilancia y la introducción de datos. Sin embargo, la propuesta de Trump sugiere una participación más directa en las deportaciones .
Se trataría de un cambio significativo en la participación militar en la aplicación de la ley nacional, típicamente limitada por la ley federal ,a menos que sea específicamente autorizada por el Congreso.
El despliegue de agentes de esta fuerza del orden para la seguridad fronteriza tiene precedentes como la "Operación Jumpstart" del presidente George W. Bush y la "Operación Falange" del presidente Barack Obama.
Nuevas funciones para la Guardia Nacional
Sin embargo, el despliegue de personal militar directamente para detener y deportar a los inmigrantes dentro de EEUU representa una escalada sustancial de las funciones militares en cuestiones de inmigración, lo que podría dar lugar a desafíos legales debido a las restricciones impuestas a los soldados en servicio activo en las operaciones nacionales señaladas por las leyes federales.
Cuando se le preguntó sobre la idoneidad de desplegar fuerzas militares contra civiles, Trump hizo hincapié en la ilegalidad de la presencia en EE.UU. de las personas a las que se dirige.
"No se trata simplemente de una entrada ilegal; es una invasión sin parangón de nuestra nación", afirmó.
Trump sigue con su ataque a los inmigrantes
La retórica de Trump no sólo continúa la narrativa de su estricta política de inmigración, sino que la intensifica. Criticó duramente el impacto de los inmigrantes en el país y a menudo utiliza un lenguaje severo para describir a los implicados en actividades delictivas, refiriéndose a ellos como "animales".
Su enfoque reitera las anteriores políticas controvertidas de su administración, como la prohibición de viajar a varios países de mayoría musulmana y la sugerencia de acabar con la ciudadanía por derecho de nacimiento, lo que refleja un refuerzo de los temas polémicos que atraen a su base.
Las próximas elecciones determinarán cómo afectarán estas audaces afirmaciones al clima político y a las reacciones de los votantes.
Cifras de inmigrantes indocumentados
De acuerdo a información del Centro de Investigaciones Pew, en Estados Unidos hay alrededor de 10.5 millones de indocumentados. De ellos, poco más de 4.1 millones son de origen mexicano, algunos de los cuales llevan décadas en el país y no califican para ningún tipo de regularización bajo la ley migratoria actual.
Hay más de dos millones que han entrado a Estados Unidos durante el gobierno de Joe Biden, pidiendo asilo, y sus casos fueron referidos a la Corte de Inmigración, cuyos jueces tardarían entre tres y cuatro años en promedio en solucionar una acumulación de más de 3.5 millones de expedientes.
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