Este jueves, los cielos de los Emiratos Árabes Unidos volvieron a oscurecerse cuando las fuertes lluvias interrumpieron las operaciones en el Aeropuerto Internacional de Dubai, el segundo más transitados del mundo. Como medida de precaución, las autoridades de los EAU recomendaron que las escuelas y los lugares de trabajo pasaran a operar a distancia.
Este fenómeno meteorológico se produjo sólo dos semanas después de que un temporal de lluvias que batió récords azotara los EAU y Omán, causando inundaciones destructivas y trágicas pérdidas, incluido un grave incidente con un autobús escolar en el que murieron 10 niños.
El 2 de mayo de 2024, los residentes de Ras Al-Khaimah fueron testigos de otra tormenta. Las redes sociales se inundaron de dramáticos vídeos de lluvias torrenciales y vientos feroces.
Aunque esta tormenta trajo menos lluvia que la anterior, Dubai registró 20 milímetros en medio día, seguía estando muy por encima de la media para esta temporada, ya que Abu Dhabi recibió 34 milímetros en el mismo periodo.
Mayor cuidado debido a las lluvias
Esta vez, sin embargo, los residentes tomaron más precauciones, evidentes en medidas proactivas como la limpieza de desagües y la emisión de alertas de emergencia aconsejando a la gente que permaneciera en casa. Estas acciones reflejan una creciente preparación basada en experiencias anteriores.
Para minimizar el impacto de estas tormentas, las autoridades colocaron en marcha varias medidas, como protocolos de trabajo y escuela a distancia y cierres de carreteras en zonas propensas a inundaciones.
Aconsejaron al público que evitara viajar a regiones montañosas, desérticas y costeras durante el mal tiempo.
Cambio climático y cultivo de nubes
La investigación científica relacionó estos patrones meteorológicos inusuales con el cambio climático. La iniciativa World Weather Attribution, en la que participaron 21 expertos, concluyó que el cambio climático podría aumentar hasta un 40% la intensidad de las precipitaciones extremas en la región durante los años de El Niño.
También se debe recordar la estrategia de los Emiratos Árabes Unidos al sembrar nubes para crear lluvia artificial y acabar con la sequía que se acostumbra en esa zona.
Las precipitaciones récord registradas dos semanas antes no tenían precedentes y fueron las más intensas que experimentaron los EAU desde que se iniciaron los registros meteorológicos hace 75 años. Dubai vio llover más en menos de un día de lo que suele ver en más de 18 meses.
Ante estos desafíos medioambientales recurrentes, los EAU mejoran su respuesta ante emergencias y aumentan la resistencia de sus infraestructuras para soportar los efectos del cambio climático global.