El presidente colombiano, Gustavo Petro, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se enfrentaron el sábado a través de las redes sociales.
En medio de una creciente atención internacional, Petro acusó al gobierno israelí de llevar a cabo acciones "genocidas" en Gaza, a lo que Netanyahu respondió alegando motivaciones antisemitas tras las declaraciones de Petro.
Este intercambio comenzó con una declaración de Petro el pasado viernes. Pidió a la Corte Penal Internacional que emitiera una orden de detención contra Netanyahu, criticando duramente los continuos asaltos de Israel en Gaza como un fracaso a la hora de evitar las continuas víctimas civiles.
Respuesta de Benjamin Netanyahu a Gustavo Petro
Petro fue contundente en su condena en X, la plataforma antes conocida como Twitter, al afirmar: "Lanzar bombas sobre miles de niños y niñas, mujeres y ancianos inocentes no lo hace a usted un héroe".
Netanyahu respondió rápidamente, defendiendo la posición de Israel y tachando a Petro de "partidario antisemita de Hamás". Este intercambio no sólo supuso un deterioro de los modales diplomáticos, sino que también significó una grave ruptura de las relaciones diplomáticas formales entre Colombia e Israel.
A principios de este mes, Petro dio un paso más al romper los lazos diplomáticos con Israel, impulsado por la desaprobación de sus acciones en Gaza. Esta acción decisiva de Colombia proyecta una larga sombra sobre las relaciones entre Medio Oriente y América Latina, y posiblemente influya en otros países para que reconsideren sus posturas.
La controversia se extiende más allá de las acciones militares, reflejando cuestiones más profundas de justicia internacional y los papeles que desempeñan los líderes mundiales.
Redes sociales como plataformas para estos intercambios
Ambos líderes utilizaron eficazmente las redes sociales para transmitir sus posturas, convirtiendo a la comunidad internacional en un observador atento. La naturaleza pública de su disputa representa el creciente escrutinio y polarización en torno a las actividades de Israel en Gaza.
Esta situación también es indicativa de cambios más amplios en la diplomacia digital, en la que los líderes mundiales utilizan las plataformas sociales para compartir opiniones críticas directamente con el mundo.
A medida que estas plataformas se convierten en nuevos lugares para el discurso diplomático, remodelan los canales tradicionales de las relaciones internacionales, añadiendo inmediatez pero también aumentando potencialmente los conflictos, como se vio en la disputa Petro-Netanyahu.