El miércoles, EEUU y Japón firmaron un acuerdo de cooperación para desarrollar un sistema de defensa antimisiles con el objetivo de contrarrestar los misiles hipersónicos provenientes de China o Rusia en su fase terminal.
Este acuerdo define los procedimientos para la toma de decisiones y la distribución de tareas entre ambos países.
Se prevé que el desarrollo del cohete comience en el actual año fiscal, que culmina en marzo de 2025, y que el proceso se extienda por más de cinco años.
El Gobierno japonés ya asignó $480 millones en su presupuesto de 2024 para este proyecto, según informaron medios locales.
El acuerdo inicial se acordó entre el primer ministro japonés, Fumio Kishida, y el presidente estadounidense, Joe Biden
Costo estimado del proyecto entre EEUU y Japón supera los $3.000 millones
Se espera que el interceptor, conocido como Glide Phase Interceptor, esté listo para su despliegue a mediados de la década de 2030. Según los términos del acuerdo, Japón se encargará del desarrollo de los motores del cohete.
El costo total estimado para el desarrollo del interceptor de misiles hipersónicos supera los $3.000 millones, de los cuales Japón contribuirá con $1.000 millones, según indicó la agencia Kyodo.
Los interceptores serán instalados en destructores equipados con el sistema de defensa antimisiles Aegis, mejorando la capacidad de defensa de ambas naciones frente a amenazas avanzadas.