Un ataque aéreo israelí sobre una vivienda del campo de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza dejó al menos 27 muertos. Este incidente, uno de los más graves de la reciente serie de conflictos, intensificó la tensión existente en la región.
Entre los fallecidos en el ataque aéreo en Nuseirat se encuentran 10 mujeres y siete niños, de acuerdo con los registros del hospital Mártires de Al Aqsa en la cercana comunidad de Deir al Balah, donde fueron trasladados los cuerpos.
Además, otro incidente separado en una calle de Nuseirat provocó la muerte de otras cinco personas, según reportes del servicio de emergencias de la Media Luna Roja Palestina.
En Deir al Balah, un ataque causó el fallecimiento de Zahed al-Houli, un alto cargo de la policía, así como de otro hombre, según lo informado por el hospital.
Enfrentamientos y bombardeos
Este ataque aéreo es una continuación de los frecuentes enfrentamientos entre las fuerzas israelíes y los grupos asentados en Gaza.
Pone de relieve la volátil situación y el grave coste humano que a menudo exigen estos enfrentamientos.
En los últimos días, se reportaron enfrentamientos entre soldados israelíes y milicianos de Hamás en el campo de refugiados de Nuseirat, acompañados por bombardeos aéreos por parte de la aviación israelí.
Por el momento, las autoridades aún no han revelado informes detallados sobre las secuelas ni las identidades de los fallecidos.
No obstante, el suceso está siendo seguido por observadores internacionales y organizaciones de derechos humanos, que instan a ambas partes a preservar las vidas de los civiles.
Las naciones y los organismos humanitarios de todo el mundo insisten en la necesidad de alcanzar resoluciones pacíficas y salvaguardar las vidas de los civiles.
Con los ojos de la comunidad internacional puestos en Gaza, el reciente recrudecimiento actúa como un recordatorio de la necesidad de diálogos y esfuerzos diplomáticos dirigidos a evitar más víctimas.