En un fallo histórico, un tribunal español a la FIFA y la UEFA que pongan fin a sus acciones anticompetitivas contra la Superliga Europea (ESL). La jueza Sofía Gil García determinó que estos organismos rectores del fútbol aprovecharon su poder para obstaculizar la libre competencia en el mercado, imponiendo restricciones injustificadas a los clubes que participaban en torneos alternativos.
La decisión respalda el fallo anterior del TJUE
Este fallo se alinea con la decisión de diciembre de 2023 del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). El TJUE declaró ilegales los requisitos de la FIFA y la UEFA para la aprobación previa de nuevas competiciones como la ESL, junto con su prohibición de la participación de los clubes.
Superliga y UEFA: la batalla continúa
A22, la empresa gestora que apoyó la creación de la ESL, celebró la decisión del tribunal. Bernd Reichart, consejero delegado de A22, la saludó como un paso hacia un ecosistema futbolístico competitivo y sostenible en Europa.
"Los estatutos de la UEFA y sus agresivas medidas para mantener el dominio han obstaculizado la innovación durante décadas. Los clubes no deberían enfrentarse a amenazas de sanciones simplemente por explorar nuevas ideas".
Sin embargo, la UEFA respondió afirmando que la sentencia no avala proyectos como la Superliga.
"El tribunal no ha dado luz verde a nuevas competiciones sin autorización. La sentencia no afecta a ninguna versión futura o modificada de tales proyectos", subrayó la UEFA en un comunicado remitido a CNN. También señalaron que se tomarían su tiempo para revisar la sentencia y decidir cualquier otra acción.
¿Qué sigue?
La FIFA aún no se ha pronunciado sobre la sentencia, y ambas organizaciones pueden recurrirla ante la Audiencia Provincial de Madrid, según reseñó el diario Sport.
La decisión del tribunal español se produce en un momento crucial para el fútbol europeo. La UEFA se prepara para la final de la Champions League, mientras que la Superliga busca revivir su proyecto tras el fallo del TJUE.
Esta sentencia podría tener un impacto significativo en el futuro del fútbol europeo, abriendo la puerta a una mayor competencia e innovación en este deporte.
